sábado, 9 de julio de 2016

Presentación de la Revista Independencias

Revista IndependenciasLa memoria histórica es un campo de disputa por los sentidos sobre el pasado, pero también una forma de pararse ante las querellas del presente. Con esta premisa nos propusimos hacer la revista digital Independencias para construir un lugar donde discutir ideas y profundizar los debates que en cada coyuntura nos desafían a pensar.
Elegimos dar comienzo a esta aventura en el Bicentenario de 1816 porque creemos que es una oportunidad inmejorable para revisar aquellos momentos fundantes de la Patria, para polemizar sobre sus interpretaciones, pero también, y especialmente para recorrer, desde múltiples miradas, la idea misma de independencia, una idea que en los últimos años renovó intensamente su significado.
En 2010, el Bicentenario fue fiesta popular, alegría, multitud y una clara definición acerca de qué y, sobre todo, con quiénes festejar. 2016 parece construido en el revés de esa trama: plazas vacías, ademanes para la pantalla, insustanciales apelaciones al consenso.
A 200 años de la declaración de la Independencia, asumimos la tarea militante de debatir ideas y el riesgo de reponer el conflicto como momento fundante de la política.
Integran este primer número:
Álvaro García Linera, Hebe de Bonafini, Estela de Carlotto, Daniel Santoro, Edgardo Esteban, Eduardo Basualdo, Teresa Parodi, Rita Cortese, Dady Brieva, Eduardo Pinto, Ernesto Salas, Hugo Yasky, María Pía López, Nicolas Tereschuk, Raúl Zaffaroni, Ricardo Forster, Roberto Salvarezza, Nora Veiras, Virginia Macchi.

Presentan:
Nora Veiras.
Daniel Santoro.
Sergio Wischñevsky.
Paula Español.
Tristán Bauer.

miércoles, 22 de junio de 2016

En esa época, los pibes leíamos historietas ...

Sin saber quien era, conocí el trabajo de Oesterheld a los 11 años en un tren en que regresaba anticipadamente desde Mar del Plata a Buenos Aires en el verano del 63/64.  Aunque mi madre, profesora universitaria en la carrera de Letras de la UBA, lo había prohibido expresamente mi abuela me compró un 3x1 de historietas que anunciaba el canillita de Témperley donde nos demoramos por horas para paliar mi burrimiento.
 





Oesterheld
Por Luis Bruschtein(publicado en la contratapa de Página12 - 22/06/2016)

“En esa época, los pibes leíamos historietas, menos televisión, nada de internet. Un día vine al kiosco de la estación y pedí la revista que siempre compraba para devorar las aventuras de Ernie Pike. Y levanto la cabeza y lo veo allí, parado junto a mí, Ernie Pike en persona. No lo podía creer, estaba allí el corresponsal aventurero en cuerpo presente. Me quedé mudo.” El relato es de Pablo Fernández Long, en ese entonces un joven vecino de Beccar, del lado bacán de las vías, a media cuadra de la estación. El kiosquero hizo las presentaciones. “Te presento a Héctor Oesterheld, pibe, no es Ernie Pike, pero es su creador.” El guión de la historieta era de Oesterheld y el dibujante lo había tomado como modelo para la imagen del protagonista.

Fernández Long lo contó el lunes, convocado por la agrupación Barrios por Memoria y Justicia, Zona Norte, al cumplirse un año de la muerte de Elsa Suárez de Oesterheld. Se colocó una baldosa recordatoria del militante popular y escritor de sueños y fantasías frente a la casa de esa familia que ya no existe. Una casa que también fue tomada como modelo por Solano López, el dibujante de otra historieta famosa de Oesterheld, El Eternauta: esa cuadra de casitas de alto con jardines y calles arboladas donde vive Juan Salvo. Estaba allí cuando comienza la mortífera nevada y está en el alma del eternauta en su eterno deseo de regresar.

“El Viejo” Oesterheld alquilaba ese chalet donde vivía con su familia. Ahora está en venta y ya tiene un cartel de “reservado”. Podría haberse convertido en la capital de la historieta en Argentina. Oesterheld es uno de los autores de historietas más renombrado en todo el mundo. Desde el “Sargento Kirk” renegado de la caballería norteamericana y amigo de los indios, hasta ese corresponsal bélico que respetaba a los japoneses y odiaba a la guerra, sumado al Eternauta, eterno luchador contra una invasión de extraterrestres en Buenos Aires y su inolvidable batalla en el estadio de River Plate, todas sus historietas se hicieron famosas en todo el mundo. Había razones suficientes para hacer ese museo Oesterheld allí donde vivió con su familia.

En el homenaje de ese lunes estaban los hermanos Pablo y Miguel Fernández Long, que eran vecinos y se hicieron amigos del hombre cálido que los invitaba a su casa para hablar de historietas y del mundo. En la vorágine de esos años, los amigos que se encontraban en ese chalet amarillo de la calle Rivadavia, en Beccar, comenzaron a cruzar la vía, donde el paisaje de los chalecitos y calles arboladas se transformaba en barrios humildes con casitas de chapa y paredes despintadas. Las hijas de Oesterheld comenzaron a militar en el barrio Los Sauces y se incorporaron a Montoneros. Las cuatro están desaparecidas.

“Si hay algo que me impresiona en esta época –me dijo Oesterheld a principios de los ‘70 en la cocina de mi casa en La Boca– es la valentía de esta generación. Yo admiro a los jóvenes de esta época y quisiera ser como ellos.” Compartíamos la militancia en el Bloque Peronista de Prensa en aquellos años. Yo tenía poco más de veinte años y por supuesto había leído varias veces las aventuras de todos sus personajes. Era generoso con ese don. Quería hacer un taller de guión “para los compañeros”, y nos invitaba invariablemente a un asado en su casa que nunca se pudo concretar. Siempre imaginé que esa frase tenía un sentido genérico, pero varios años después me di cuenta que en parte era así, pero que tenía su anclaje en el amor y la admiración que sentía por sus hijas y el mundo de jóvenes que circulaba por ese chalet amarillo, justo enfrente de la estación. Es el recuerdo de un tipo cálido, dispuesto a la amistad, sin atisbo de narcisismo y hasta daba la impresión de que le divertía esa fama casi fanática que despertaba en sus lectores con sus sueños de aventuras fantásticas y al mismo tiempo cercanas.

Fue un día raro este lunes en esa esquina, un lunes frío y nublado en esa esquina inusitadamente llena de veteranos y de jóvenes, la esquina de los sueños o la esquina de la aventura y también la esquina del dolor.

El Bichi fue otro de los que habló. Amigo de Oesterheld y de sus hijas, era dirigente del Barrio El Sauce, del otro lado de la vía, sobreviviente del grupo de Tareas de la ESMA. “Tengo que agradecerle –dijo– al compañero Cesar Nieto que fue el que avisó a todo el mundo del secuestro.” Nieto es un viejo militante del peronismo de Zona Norte, habló antes también, como amigo de Oesterheld. Un día raro con esa mezcla de veteranos y de jóvenes frente a esa casa donde todavía está la marca de los sueños. Estaba la Abuela de Plaza de Mayo, Delia Giovanola, que fue amiga y compañera de Elsa Sánchez, la única de la familia que sobrevivió para sobrellevar todo el dolor. Habló un nieto y hablaron los amigos y vecinos, que también alguno fue novio de una de las chicas y las acompañaron en su militancia, había veteranos de luchas y fundaciones, de derrotas y de algunas victorias. Y el locutor del acto era un veterano de Malvinas, Edgardo Esteban. Una mezcla que es bien argentina de dolores y alegrías, de caricias y puñetazos en el estómago. Oesterheld fue secuestrado en 1977 y se supone que sobrevivió hasta 1978 porque uno de sus captores era admirador de sus historietas.

Son otras épocas, los riesgos son diferentes, pero el afán de justicia es siempre el mismo y las nuevas generaciones alimentan la llamita de esa lucha que nos hace mejores como personas y como sociedad. La frase de Oesterheld vale para todos, como él admiró a esa juventud, los veteranos siempre se emocionarán con los jóvenes de todas las épocas que sientan ese afán de justicia.

Igual que la frase de la baldosa por la memoria que quedó en la vereda de la casa de Juan Salvo, del sargento Kirk o del falso Ernie Pike que era su creador, “El Viejo” Oesterheld, con su mujer Elsa y sus cuatro hermosas hijas, una frase que también quedará en la tinta que escribe de la fantasía y de los sueños:

“Aquí vivió y creó sus personajes Héctor Germán Oesterheld, Militante popular-Escritor creador de El Eternauta detenido-desaparecido el 27-04-1977 por el terrorismo de Estado”.

sábado, 18 de junio de 2016

López - Convento - Corrupción


A las cuatro de la mañana, cuando se votaban en particular los últimos artículos de la ley ómnibus, el oficialismo introdujo sin dictamen previo el traspaso de la UIF al Ministerio de Hacienda. En repudio, el kirchnerismo se retiró de la sesión.

Tomado del blog Poesía y Ramos Generales.

Estos últimos han sido días plenos de actividades insólitas en la vida pública de nuestra sociedad. La inverosímil imagen del revoleo, por parte de un ex funcionario, de una decena de millones de dólares supuestamente mal habidos por sobre la tapia de un convento junto con la de unos legisladores inmorales que sin ponerse colorados avalan en el congreso la estafa que significa habilitar la venta de los activos accionarios propiedad de los jubilados para pagarles a éstos deudas añosas, junto con un blanqueo y el desmantelamiento de todos los organisimos del estado dedicados a la investigación y persecución de delitos económicos complejos que literalmente resulta en la premiación de la impunidad para el robo de cientos de miles de millones de dólares en perjuicio del estado nacional;  parecen secuencias de algún film de la escuela neorrealista italiana de mediados del siglo pasado mas que realidad contemporánea de nuestro país.
Desde mucho antes de las elecciones hasta hoy mismo, seis meses después de asumido el nuevo gobierno que con la anuencia de las capas medias y bajas de la población se erigieron en representan los intereses de las elites asociadas con el imperio, se ha difundido la comisión de decenas de hechos delictuales de los que son responsables sin duda la mayoría de los funcionarios de la actual administración del gobierno nacional. Muchos de esos delitos han sido impunemente reconocido y aceptados por los propios responsables. En ellos están involucrados desde el presidente de la nación, sus ministros, secretarios de estado y funcionarios varios, pasando por viejos amigos y compañeros de la escuela, familiares en diverso grado, socios y hasta circunstanciales personajes menores.

Gracias al activismo del Partido Mediático Internacional el tema del día es el caso López - Convento  y el consecuente e inevitable (y deseado) fin del kirchnerismo y comienzo de regeneración del peronismo al decir de un “opinador” autorizado. Es indudable que el tema del momento en todos los medios - todos sin excepción - es “La Corrupción”. Como si fuera algo nuevo. Como si fuera un tema exclusivo de la “década ganada”. Como si no fuera una cuestión inherente a la sociedad humana y en particular un subproducto específicamente perfeccionado por el capitalismo.

La cuestión es que esa tal “La Corrupción” no es una característica actual que apareción de un repollo de nuestra sociedad hace una década como algunos interesados difunden a los gritos desgarrándose sus prístinas y virginales vestiduras en medio de histéricos cantos y loas a las purezas morales de sus socios, aliados y compañeros. No nos engañemos, ni siquiera en eso los argentinos somos ni originales ni campeones mundiales. La corrupción es una enfermedad que afecta a todas las comunidades humanas desde tiempos inmemorables.  Tampoco es un “defecto” inherente al manejo de los asuntos públicos ni de un sistema de organización social en particular o de una agrupación política específica como suelen argumentar los defensores del liberalismo aún cuando el sistema capitalista lo ha perfeccionado en su favor.

Al respecto, las diferencias entre sociedades y épocas no residen en las conductas sociales denominadas “corruptas” que suelen ser mas o menos las mismas en todas partes sino en las legislaciones que imponen las élites dominantes en cada caso para organizar, regular y legalizar el sistema de corrupción que habrá de imperar y quienes serán los beneficiados beneficiarse y quienes los excluidos en cada época y lugar.
A finales del gobierno de la dictadura cívico – militar trabajando en una empresa multinacional de capitales europeos y proveedora del Estado, me vi compelido a mantener una entrevista personal  con un muy alto directivo de la empresa. Este señor de acento extranjero, con  mucha naturalidad me explicó detalladamente el método establecido por la compañía para la “expatriación” -  vía sobreprecios en el pago de materias primas importadas - de divisas giradas al sudeste de Asia que luego eran transferidas por un agente en Singapur a un banco en Montevideo desde donde el “muy alto directivo” en persona las retiraba en efectivo y las reingresaba al país en sus bolsillos para, ya fuera de los registros contables, aplicarse al pago de “comisiones” y “gratificaciones” a funcionarios del estado que fungían bajo las órdenes del Ministro de Economía de la dictadura  José Alfredo Martínez de Hoz y que fueran reclutados de entre los directores de la propia empresa “corruptora”. Debo aclarar que una vez finalizada la detallada explicación el “muy alto directivo” me informó que por supuesto dicha entrevista no había tenido lugar y que él  mismo jamás había estado allí, luego me saludó demasiado amigablemente y se retiró. Nunca mas lo volví a ver. Tampoco a los demás involucrados. A esta altura deben estar todos muertos y sus memorias honradas por sus deudos en algún coqueto cementerio. Por supuesto que jamás supe que antes de morir hubieran arrojado bolsas con dólares sobre la tapia de un convento.

Resulta que hoy toda esa gente adulta, inteligente e informada que derrama sus histerias, enojos, irritaciones e indignaciones por los medios y las redes sociales, de ambos lados de “la grieta” van por la vida señalando a un señor ex funcionario de gobierno por arrojar dólares sobre la tapia de un convento como si del holocausto final se tratara. Es gente de todo tipo y color. Está la que se relame y babea en un orgasmo de excitación pornográfica por las posibles implicancias del caso y está la que se deprime, descorazona y roza el intento suicida también por las posibles implicancias del caso. Ninguno de todos nos hacemos cargo de que conformamos desde tiempos inmemoriales sociedades plenas de corrupción, egoísmo, injusticias, expoliación, sometimientos y muerte.

Vale señalar lo curioso que resulta comprobar que son escasas las personas que tienen presente el hecho de que existió un agente de varios servicios de inteligencia extranjeros de potencias hostiles infiltrado en el sistema de justicia de nuestro país como fiscal de la nación y que fuera “suicidado” con el  involucramiento de dos o mas personas que hoy son funcionarias del actual gobierno o trabajan a su servicio. Con ese antecedente, mal puede llamar la atención de que un ex funcionario termine arrojando fardos de dinero por sobre una tapia. Todo depende de si recibió o no algunos llamados específicos. Solo hay que ponerse en el lugar de quien recibe dichos llamados.

La verdad no existe. La inteligencia es una fantasía. La razón es solo otra religión mas.

MC

Carta abierta al Diputado Nacional SERGIO MASSA


Carta abierta dirigida a Sergio Massa firmada por Miguel Ángel Fernández Pastor (*)
(publicación tomada de la página de Leopoldo Moreau en Facebook )
Querido Sergio Massa
Esta carta está escrita desde el dolor, desde el dolor incrustado en el alma por el impacto que produjo en mí leer el dictamen de mayoría, que se aprobó con el apoyo del Frente Renovador que vos liderás, del proyecto de ley del Programa de reparación histórica para jubilados y pensionados propuesto por el gobierno.
La Argentina hoy goza de un sistema previsional que tiene la mayor cobertura, con el haber mínimo y medio más alto de América Latina y con un fondo de reserva como es el FGS que garantiza su sustentabilidad.
Esa situación se logró por un conjunto de decisiones políticas. Nadie mejor que vos ha podido constatar la poderosa herramienta de redistribución del ingreso que representa la seguridad social, por lo que mi tristeza se agranda.
Ambos sabemos que el logro de esos resultados no fueron sencillos para la sociedad argentina. Cuando llegaste a ANSES, hacía más de 10 años que los jubilados tenían un haber inalterable de $150, cifra que representaba, en el momento que asumiste como Director Ejecutivo (principios de 2002), menos de 75 dólares, lo cual a dinero de hoy significaría $1.095, un quinto de lo que cobran quienes perciben hoy la mínima. Pero más impactante aún es que quienes recibían ese haber podían considerarse como “privilegiados”, ya que el número total de beneficiarios previsionales ascendía a menos de la mitad de los que existen en la actualidad.
Tu inteligencia y el coraje de Néstor Kirchner hicieron que exista el caso Badaro. Te recuerdo que Badaro surgió producto de haber privilegiado a los que cobraban la mínima, once aumentos para los que más necesitaban entre el 2002 y el 2006, así nació ese caso. Tal decisión “aplastó” la pirámide y dio motivo para que fueran a la justicia quienes ganaban más que la mínima. Curiosamente reclamando la “igualdad ante la Ley”, es decir que se les diera el mismo aumento que a los que cobraban la mínima, particular interpretación de la igualdad que hace añicos la equidad. Si el Gobierno hubiera resuelto dar amento de menor envergadura pero para todos en el mismo porcentaje, no habría caso Badaro. Tengo que decirte que a pesar de ello aún me exalta el corazón recordar aquellos tiempos. Hacía falta coraje, sabiendo las consecuencias que traían aparejadas usar todos los pocos pesos con que contaba el Estado para beneficiar a los que mas necesitaban. Aún siento legitimo orgullo el haber sido parte, aunque sea en una parte chiquitita, de aquella decisión.
También recuerdo tu alegría cuando se aprobó la Ley 25.994, que nosotros bautizamos como “plan de inclusión jubilatoria”, sentando las bases del crecimiento continuo de la cobertura previsional. Eufórico me lo transmitiste por teléfono, sin duda ese fue el principio de la revolución más grande en materia previsional que recuerde nuestro país y fuimos parte…! Te acordás lo que decía aquella viejita cuando cobró la jubilación, que a los 90 años iba a poder comprarle por primera vez en su vida un regalo a su nieto? Esta es solo una anécdota, hubieron miles, luego cientos de miles y por fin millones que pudieron hacerlo. Hoy ninguna viejita de 90 años podrá decir lo mismo, ya que seguro que cobra una jubilación y pasarán al menos 30 años antes que alguien haga una confesión como esa, y siento orgullo de haber sido parte de esa reparación. Aquella “travesura” significó el triunfo del amor, fue la exaltación máxima de la solidaridad social. Cuando escribo esto aún me emociono…
Luego vino la Ley 26.222, otra iniciativa relevante de esa época en la que nació lo que hoy se quieren robar, el Fondo de Garantía de Sustentabilidad y el principio de la estatización del sistema previsional.
Tanto esfuerzo y tanto amor están por desbarrancarse, están por irse por el túnel del individualismo, de la pobreza intelectual y del egoísmo. Te quiero pedir desde lo más profundo de mi corazón y con la mayor humildad, que no lo permitas.
Adjunto a esta carta te envío tres cuestiones que no pueden permitirse que ocurran. Si quieren blanquear plata que lo hagan, que blanqueen todo lo que se les dé la gana, pero que al menos no se lleven puesto lo que tanto esfuerzo costó construir. Que no haya que empezar de nuevo.
Podría darse la paradoja que en un futuro no muy lejano, tengas que reconstruir lo que hoy están a punto de destruir, ya no como un parlamentario sino como Presidente.
Con todo mi cariño,
Miguel Ángel Fernández Pastor

(* ) Miguel Angel Fernandez Pastor es abogado y uno de los referentes más importantes de Seguridad Social del país y quiere difundir una carta pública a Sergio Massa criticando su firma del dictamen.
Fue director de Anses durante los 7 años de gestión de Sergio Massa en ese organismo y escribieron un libro juntos, llamado "De la Exclusión a la Inclusión Social", fue el ideólogo y mentor de la Ley 25.994, y también reglamento la Ley 24.476, estas dos leyes constituyen la base de lo que se conoce como el "plan de inclusión jubilatoria", también redacto la Ley 26.222 que representó el primer paso de la re-estatización del sistema previsional. Del 2008 al 2013 dirigió en México el Centro Interamericano de Estudios de la Seguridad Social (CIESS). 
Tres temas que no pueden pasar:

1.- Emergencia en materia de litigiosidad:
El Dictamen de Mayoria 15-P.E.-16, en su Articulo 1, reza: ”Declárase la emergencia en materia de litigiosidad previsional …. El estado de emergencia tendrá vigencia por TRES (3) años a partir de la promulgación …El PODER EJECUTIVO NACIONAL podrá prorrogarlo por única vez y por igual término.
Etimológicamente, el estado de "emergencia" presupone: "emerger", "salir" de una situación de crisis la cual, siguiendo la conceptualización clásica de emergencia constitucional, no puede ser cualquier crisis sino que debe ser una de carácter "excepcional". Además de esto, debe poner en peligro la continuidad del sistema, la existencia del Estado y debe afectar en forma directa al bien común. Por ende, que su resolución requiera medidas extraordinarias.
El gobierno ha expresado que actualmente existen 380.000 casos totales con acciones judiciales iniciadas, una proporción de los mismos con sentencia firme y otros bajo trámite en sede judicial. Por otro lado, el titular de ANSES ha manifestado que el organismo se encuentra en condiciones de resolver 100.000 casos por mes, lo que presupone que todos los casos estarían resueltos en menos de cuatro meses. En este marco, corresponde, entonces, hablar de emergencia en materia de litigiosidad? Es posible que cuatro meses de tarea dura en ANSES puedan poner en peligro la continuidad del sistema? Sin duda no existe, al menos desde este punto de vista, racionalidad alguna en imponer el estado de emergencia como eje central del proyecto de Ley.
Asimismo, la emergencia que se propone prevé una vigencia de seis años, un plazo un tanto extenso para resolver un problema que requiere 4 meses de tarea, conforme la capacidad operativa indicada por el responsable de su ejecución. Esta cuestión fue criticada en la reunión de las comisiones de Presupuesto y de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, por lo que nadie puede manifestarse desprevenido respecto de esta extravagante disparidad. Sin embargo, el oficialismo la defendió a “capa y espada”, y si bien cedió en diversas cuestiones, mantuvo inalterable la declaración de emergencia y el plazo de seis años perfumando su redacción con redundancias.
Para poder comprender el motivo de la insistencia del oficialismo en mantener a salvo el dictado de la emergencia, vale recrear cuales son los efectos prácticos plasmados en nuestra Constitución Nacional respecto de la misma. El artículo 76 de la Carta Magna dice: “…Se prohíbe la delegación legislativa en el Poder Ejecutivo, salvo en materias determinadas de administración o de emergencia pública, con plazo fijado para su ejercicio y dentro de las bases de la delegación que el Congreso establezca…”. Es decir, el objetivo de este artículo en el proyecto de Ley es que el Congreso de la Nación Argentina delegue en el Poder Ejecutivo, por seis años, la facultad de legislar en materia de litigiosidad previsional.
Rápidamente, cabe preguntarse ¿para qué quiere el Poder Ejecutivo esta facultad de legislar en materia de litigiosidad previsional? La respuesta es simple: para tener “patente de corso dentro del sistema previsional”, lo cual le permitiría:
1. Pagar como le fija la Ley
2. Extender los plazos en las formas de pago
3. Hacer quitas extraordinarias
4. Dejar de pagar en caso que se agoten los fondos necesarios
5. Disponer de activos extraordinarios, donde vender las acciones del FGS configurarían una alternativa prioritaria
6. Dar el FGS en garantía a algún banco o conglomerado de bancos, obteniendo un adelanto de los fondos necesarios para afrontar la obligación de pago de los beneficios abonándoles una “módica comisión” por este “servicio”
7. Derogar temporariamente alguna norma que incomode
Esta lista, obviamente no taxativa, pero, es lo suficientemente ilustrativa para que cualquiera se de cuenta que el destino de los jubilados en su conjunto, y no solo de aquellos que tienen derecho al reajuste, queda en manos de quienes nunca creyeron en el sistema solidario, público y de reparto.
Pero lo mas probable es que “sinceren” el sistema, es decir lo hagan deficitario, ineficiente o como se dice en estos tiempos “no sustentable” para que entonces quede totalmente justificado y “no quede más remedio” que privatizar otra vez el sistema, y de esta manera los bancos salvadores se queden, una vez más, con los fondos de los jubilados.

2.- La litigiosidad
Si bien el Dictamen de la mayoría introdujo diversos cambios al proyecto original, no ha despejado ninguna duda emergente del mismo ni tampoco las relacionadas a la información brindada por el gobierno, a saber:
1. El número de beneficiarios: Se ha debatido hasta el cansancio respecto del número de beneficiarios alcanzados por la reparación histórica, si son 2,5 millones como dice el Director Ejecutivo de ANSES, o si son 1 millón o 700 mil como publicó Pagina 12, con base en un informe de Amado Bodou. Lo que no hay duda es que el número es mucho más acotado que el estimado por ANSES. Sabido es que una simple corrida en los sistemas informáticos de ANSES despejaría cualquier duda, pero hasta la fecha esa acción no se ha formalizado. No se hace porque no es lo mismo una “reivindicación histórica” para 2,5 millones de personas que para un tercio de dicho número, el impacto político y el respaldo popular asociado es distinto.
2. Quita en el monto a percibir por los beneficiarios: En este punto, tampoco el dictamen aportó nada nuevo, mas allá de alguna cosmética de ocasión. Se mantuvieron inalterables los índices propuestos.
3. La forma de pago: En este aspecto tampoco el dictamen aporta novedades, quienes acepten la transacción cobrarán sus acreencias a lo largo de 4 años, 50% en efectivo y el resto en doce cuotas trimestrales.
4. Los que tienen sentencia firme y no acepten la transacción: En este punto el dictamen introduce un cambio trascendente, ya que ordena a ANSES el pago de estos casos en un plazo de 120 días, aunque no queda claro si cobrarán al contado o con la forma de pago que el dictamen prevé para el resto de los beneficiarios.
5. Sentencias que superan el máximo legal: En este punto se mantuvo la redacción original y establece que ANSES hará acuerdos que no vulneren ese tope, pero no aclara que tratamiento tendrán aquellas sentencias que, en autoridad de cosa juzgada, ordenan liquidar sobre dicho tope.
6. Terminación del proceso: El Dictamen en el artículo 6 insiste respecto que, una vez homologado el acuerdo judicial, la transacción tiene efecto de cosa juzgada, “…dándose por concluido el proceso judicial…”. Si bien resulta tedioso explicarlo una vez más, el proceso no culmina con la sentencia sino con el cumplimiento de la sentencia.
Pero, más allá de que la mayoría de las cuestiones arriba descriptas puedan ser opinables lo que interesa en este punto es si la propuesta de dictamen resuelve el problema de fondo, es decir si a partir de la aplicación de la ley ya no habrá litigiosidad en el sistema, al menos que tenga causa en el reajuste del haber y si la propuesta significa un ahorro en términos económico en proporción a la quita que realiza.
Más allá de los aspectos éticos, morales e incluso los jurídicos respecto de lo que significa que el Estado proponga liquidar luego de varios años de litigio una sentencia en autoridad de cosa juzgada con una significativa merma, o asimismo dejando pasar tal situación como una evidente violación a los derechos humanos de los titulares de sentencia, es necesario poner sobre la mesa – desde la mirada de la sociedad en su conjunto – el costo/beneficio que implica aplicar la propuesta del oficialismo. En ese sentido, podría ameritarse el siguiente análisis “lógico” de la aplicación de la ley que nos ocupa:
A Si se formula, a quienes tienen sentencia firme, una oferta transaccional que en términos reales signifique una quita del monto a cobrar y el pago en cuotas de su acreencia en relación a lo determinado por la sentencia – más allá que a primera vista podría parecer absurdo que alguien acepte tal oferta ya que, según el texto del dictamen, la propia ley lo habilita a cobrar tal cual indicó la justicia -, podrían darse dos situaciones:
1. Que un beneficiario se presente y acepte la oferta de ANSES: en este caso es necesario que SU abogado homologue el acuerdo. Aquí pueden ocurrir dos cosas
i. Que el abogado opine que es bueno que el beneficiario acepte la propuesta. En este caso no hay inconveniente, y el juez seguramente homologará el proceso y se podrá efectivizar el acuerdo
ii. Que el abogado opine que es perjudicial que la acepte. En este caso pueden suceder dos cosas:
1. Que el beneficiario opine como SU abogado, entonces no tiene lugar el acuerdo y ANSES deberá hacer lugar al pago conforme la sentencia
2. Que el beneficiario insista en que se homologue el acuerdo. En este caso, se vuelven a abrir otras dos alternativas:
a. Que el juez homologue igual el acuerdo, en este caso se termina el proceso
b. Que el juez no homologue el acuerdo, lo cual implica que ANSES deberá hacer lugar al pago conforme lo explicitado en la sentencia
2. Que un beneficiario no acepte la oferta y reclame la liquidación según lo resuelto por la justicia. En este caso, caben dos opciones:
i. Que ANSES liquide las sentencias según determina la justicia, lo cual implica que:
1. Ninguna persona, razonablemente, optará por aceptar la propuesta de Transacción, por lo que el ahorro en los montos involucrados se limitará a “aquellos que aceptaron”
2. Los que habían aceptado, luego de haber cobrado conforme el Acuerdo, se presenten en la Justicia denunciando que su voluntad estaba viciada toda vez que fueron persuadidos que era la única alternativa de cobrar como se había argumentado por el Estado y sin embargo fueron engañados. Algún juez va aceptar el argumento y el circulo vicioso se retroalimentará
ii. Que ANSES no liquide las sentencias, amparada en la declaración de emergencia
1. Si ANSES no liquida las sentencias de aquellos que no aceptaron el acuerdo, cosa que el dictamen le ordena, demás esta decir que el conflicto se agudizará hasta límites insospechados. Pero lo mas grave será que los jueces tendrán que intervenir y tomar todas las medidas necesarias para que se paguen: astreintes, embargos, detenciones, entre otras. ¿Cuánto tiempo podrá resistirse esa presión? Demorará un poco mas o un poco menos, pero tarde o temprano ANSES tendrá que liquidar las sentencias de aquellos que no acepten el acuerdo.
Como dato adicional, vale aclarar que la mayoría de los abogados previsionalistas firman “convenios de honorarios” de entre el 20 y el 30% del monto del retroactivo de la sentencia, por lo que cabe preguntarse: ¿qué abogado va a aconsejarle a su cliente que acepte la propuesta? El sentido común indica que le pedirá que no acepte y si éste insiste querrá cobrarle los honorarios por el total de la sentencia ya que la disminución del monto es responsabilidad del cliente. En ese caso, del monto de la sentencia el beneficiario deberá asignar un tercio para el pago del impuesto a las Ganancias y más de un tercio para el abogado. Entonces, ¿cuánto le queda al pobre jubilado?
En conclusión: si se aplica la propuesta del gobierno, lejos de resolverse la litigiosidad ésta se verá potenciada, el Estado destinará un enorme esfuerzo humano (para liquidar 380.000 sentencias) y económico (pagar las transacciones) para que finalmente el problema no haya sido resuelto. Lejos de eliminarse la industria del juicio de la que tanto se habla, la misma se potenciará hasta límites insospechados. En definitiva, la litigiosidad seguirá intacta, se destinarán cuantiosas sumas y estas llegarán tarde como siempre a las manos de los beneficiarios. Beneficiarios a los que de forma unánime en el debate dicen querer proteger, pero en la realidad nadie hace. Cualquier parecido con la Ley que privatizó YPF no es mera casualidad…

3.- Pensión Universal para el Adulto Mayor:
Sin duda alguna el cinismo ha primado en la redacción de los puntos correspondientes a la Pensión Universal para el Adulto Mayor tanto del proyecto de Ley como del dictamen de la mayoría. La primer lectura de los mismos permite darse cuenta que no se trata de una pensión en los términos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) y que no es universal. Se trata de una prestación extraña al sistema previsional, cosa que no debería ser criticada por esa mera cuestión si, lo que se tratase de incorporar fuera una prestación superadora. Sin embargo, lejos de ello, esta “Pensión” representa una intolerable involución del sistema. Hay que recordar que en la Argentina la cobertura se encuentra cercana al cien por ciento de las mujeres mayores de 60 años y los hombres mayores de 65 años, que a pesar de ello el sistema previsional no solo no tiene déficit sino que cuenta con un magnifico y saludable FGS que crece año a año, tornando al sistema en absolutamente sustentable.
Es al menos irracional que con un sistema previsional sustentable se intente correr la edad de retiro de las mujeres en 5 años, se les reconozca como beneficio el 80% del monto de la jubilación mínima y además se imponga la incompatibilidad con la pensión derivada. Solo puede entenderse esa prestación como producto del cinismo y la perversión, desconociendo todo análisis razonable de los recursos del sistema.
Asimismo, su carácter de universal es falso, ya que según la Real Academia Española dicho término significa “Que comprende o es común a todos en su especie, sin excepción de ninguno.” Al ser incompatible y no generar derecho a pensión ya no es para todos. Basta un sencillo ejemplo para dejar clara esta aseveración: un matrimonio vive de la jubilación de uno y la pensión universal para el adulto mayor del otro, cuando el titular de la jubilación fallece quien quede no solo verá disminuido el haber de su cónyuge a un 70% sino que perderá toda su “pensión”.
Pero el paroxismo del cinismo queda cristalizado en el Artículo 16, el cual reza: “El goce de la PENSIÓN UNIVERSAL PARA EL ADULTO MAYOR” es compatible con el desempeño de cualquier actividad en relación de dependencia o por cuenta propia. Los aportes y contribuciones que las leyes nacionales imponen al trabajador y al empleador ingresarán al SISTEMA INTEGRADO PREVISIONAL ARGENTINO (SIPA), y serán computados como tiempo de servicios a los fines de poder, eventualmente, obtener un beneficio previsional de carácter contributivo”. Es decir que no solo se extiende la edad de la mujer para acceder a un beneficio 5 años, se le paga el 80% del haber mínimo, sino que se pretende que siga trabajando. Para que se entienda bien, quien necesita de una pensión de esta características es una persona de muy bajos recursos, que llegó a los 65 años peleándole a la vida y se pretende que para tener un beneficio “contributivo” siga trabajando. Es difícil imaginar mayor perversidad. Duele solo imaginarlo..!
En nada mejora esta situación la prórroga de la “Moratoria” por tres años y solo para las mujeres, discriminatoria en el caso de los hombres y no hace mas que representar una nueva muestra de cinismo y de perversidad.
Un párrafo aparte merece el monto del haber propuesto: 80% del mínimo. La sabiduría de la Real Academia Española que dice que mínimo es “Tan pequeño en su especie, que no lo hay menor o igual” hace que huelguen las palabras. Pero la imaginación de un cínico, supera a la realidad: por Ley se establecerá el 80% de algo tan pequeño en su especie, que no hay menor o igual. La especie son los argentinos que más necesitan…!Principio del formulario
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