Leemos en Ramble Tamble, que la agencia de publicidad Young & Rubicam, la misma que después de producir un corto publicitario argentino referido a los juegos olímpicos que fue duramente criticado por el gobierno del Reino Unido, pidió
disculpas y comunicó su "condena enérgica" por el spot del atleta
argentino en Malvinas y que solicitó al gobierno argentino su retiro de los medios, es un grupo controlado por WPP del que forma parte la agencia Burson-Marsteller, Ltd.
Husmeando por allí nos enteramos de que el grupo controlante WPP (Wire & Plastics Products) es uno de las mayores agencias de publicidad del mundo y tiene sus oficinas principales (¡oh casualidad, válgame dios!) en Londres, UK, aunque sus oficinas ejecutivas están registradas en Dublin, Irlanda, tal vez en razón de alguna arquitectura especialmente diseñada para lograr la menor tasa de impuestos pagados en su rubro. (eso dicen sus competidores que son todos unos chicos muy malos)
Por otra parte la ahora arrepentida y ofendida Y&R que declara que el spot es "contrario" a la política de la empresa de no involucrase con "cualquier cosa que tenga motivaciones políticas" está integrando un holding de empresas con la agencia Burson-Marsteller, Ltd. antigua proveedora de la administración genocida del general Videla y creadora del malamente recordado eslógan "Los argentinos somos derechos y humanos."
"El slogan había sido ideado a pedido de la dictadura por la empresa Burson Marsteller, ya contratada en 1978 para mejorar la imagen de Videla. El objetivo era neutralizar o revertir las denuncias realizadas por sobrevivientes de los centros clandestinos de concentración, los exiliados y familiares de las víctimas en el exterior, que la dictadura llamó "campaña antiargentina"Eso sí, aclaremos, lejos de motivaciones políticas, la campaña para invisibilizar el genocidio solo tenía motivaciones puramente económicas che.
Hasta la próxima