En el habitual marco de estupideces que, para variar, se difundieron acerca del caso Bonelli y la pública crítica presidencial, leemos en A todas las voces que entre los 12 periodistas que manifestaron su opinión al respecto hubo algunos quienes previsiblemente "repudiaron" los dichos presidenciales,
Ellos fueron: el editor general Ricardo Kirschbaum, Eduardo Van der Kooy, Susana Viau y Darío Gallo. Esa posición irreductible también fue abonada por el periodista Fernando Laborda, de La Nación.hubo quienes además de repudiar "reflexionaron" acerca del tema,
Entre quienes además de criticar a la mandataria, decidieron hacer reflexiones sobre la actividad periodística se pudo leer a Daniel Santoro (Clarín), Fernando González (actual director de El Cronista Comercial y ex editor de Clarín), Pablo Sirvén y Carlos Pagni (ambos La Nación) y Roberto García (ex Ámbito Financiero, hoy columnista de Perfil).
y por fin solo dos que "reflexionaron profundamente"
... hubo sólo dos expresiones más profundas: (...) el CEO de Perfil Jorge Fontevecchia y el columnista de Página/12, Horacio Verbitsky, no dudaron en plantear problemas de fondo ligados a las prácticas non sanctas.Si nos atuviéramos a lo que sostiene DsD, solo estos 12 individuos de todo el universo de personas que ejercen dicha profesión expresaron sus opiniones publicamente sobre los dichos presidenciales.
Vemos que aparecen Clarín, La Nación y Perfil de un lado y el solitario Página 12 del otro como los soportes y plataforma de opinión de éstos 12 apóstoles de la profesión que hoy por hoy se disputan ese espacio de ser productores de "discurso de verdad" en la prensa escrita como si allí y en ellos se acabara ese mundo. Claro que hay muchos periodistas mas, para el caso invisibilizados por acciones u omisiones propias o ajenas, que de una u otra forma también opinan aunque no figuren en esa lista.
Casualmente en DsD encontramos una opinión aunque no lo parezca sobre el caso Bonelli en "Un editor de Clarín y una carta ..."
Heller agregó que luego de eso llegó “la montaña rusa del tole tole con el planeta K, y el horror: el prestigio de una marca tan querible como las tostadas en la mesa del desayuno familiar deslizándose por un tobogán sin fin”.
Y aseguró que mientras eso ocurría “muchos editores y periodistas del diario parecíamos estatuas de sal, o un ejército de terracota de esos monitos que no oyen, no ven, no hablan. Escudados en la idea de que era una pelea ajena, los que no somos cruzados de una guerra lejana que ni entendíamos hicimos la más fácil. Esperar. Amparados en el NS/NC, muchos incluso aprovecharon para pasarse a gas”.
Luego afirmó que se despidió “en paz” de las autoridades periodísticas del matutino.El punto principal no es que algunos, (muchos, demasiados), cagatintas hipócritas comerciantes como Bonelli, que ni siquiera inventó su rubro, operen descaradamente desde su profesión con el simple y único objeto de enriquecerse. Esa clase de personajes miserables parece que siempre existirá en toda actividad humana.
El problema es que existen muchos mas que ante " ... la montaña rusa del tole tole ..." con cualquier planeta ( y la historia de las sociedades es siempre una montaña rusa del tole tole en continuado), hacen la mas fácil, es decir "Esperar. Amparados en el NS/NC, muchos incluso aprovecharon para pasarse a gas".
Ante tanta palabra gastada y ante tanta mediocre banalización de los que significa ética y porfesión en periodísmo no puedo menos que recordar estas líneas finales de otra carta mas reconfortante y ejemplificadora del significado ético de una profesión firmada por un periodista que no se pasó a gas ante el tole tole.
“CARTA ABIERTA DE UN ESCRITOR A LA JUNTA MILITAR”
Estas son las reflexiones que en el primer
aniversario de su infausto gobierno
he querido hacer llegar a los miembros de
esa Junta, sin esperanza de ser escuchado,
con la certeza de ser perseguido, pero fiel al
compromiso que asumí hace mucho tiempo
de dar testimonio en momentos difíciles.
Rodolfo Walsh. - C.I. 2845022
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977.
aniversario de su infausto gobierno
he querido hacer llegar a los miembros de
esa Junta, sin esperanza de ser escuchado,
con la certeza de ser perseguido, pero fiel al
compromiso que asumí hace mucho tiempo
de dar testimonio en momentos difíciles.
Rodolfo Walsh. - C.I. 2845022
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977.
Hasta la próxima.