domingo, 2 de febrero de 2014

No tenía por todo documento mas que su memoria - J. L. Borges

Groundhog Day

Dos de Febrero de 2014. Ya es la hora.

Hace unos diez años se estrenaba una interesante película titulada Groundhog Day traducida al español como El día de la marmota protagonizada por Bill Murray.

En ella, Phil, el anunciador del clima de una cadena de televisión, es enviado un año más a un pequeño pueblo a cubrir la información del festival del Día de la Marmota que allí se celebra cada año. Por razones que se desconocen Phil y su equipo se ven sorprendidos por una tormenta que les obliga pernoctar en el pueblo. A la mañana siguiente, al despertarse Phil, comprueba atónito que comienza otra vez el mismo "Día de la Marmota" que había terminado la noche anterior. Exactamente el mismo. De esta manera el personaje, ve transcurrir los mismos sucesos diarios cada día siendo él el único que es consciente de ello mientras que los demás inadvertidos de la anomalia observan asombrados las rarezas que este produce al saber anticipadamente lo que va a ocurrir.

El día de la Marmota se festeja realmente cada 2 de Febrero en la localidad de Punxsutawney, en el estado de Pensilvanna - USA.

Este Enero de 2014 anduve recorriendo algunos caminos y localidades de nuestra Patagonia, respirando un aire bastante menos enrarecido que el de estaintoxicada e intoxicante Buenos Aires dicho esto en todo sentido. Aprovechando los interminables y silenciosos atardeceres de nuestra cordillera austral para leer un libro que recomendó Leopoldo Moreau en Facebook. Es "En el ojo de la tormenta" de Mario Rapoport, licenciado en economía politica de la UBA  y doctor en Historia (La Sorbona - París) entre otras pequeñeces.

Muy recomendable lectura ésta para los no especialistas interesados que deseen aprender y comprender la historia de la economía moderna y su impacto en nuestra sociedad en el presente. Algunos párrafos parecen haber sido redactados hace menos de quince minutos.

Me sorprendió desde el mismo inicio con el epígrafe que el autor elige para la introducción de su trabajo: "No tenía por todo documento mas que su memoria" de J. L. Borges.

Es de la memoria de lo que quisiera hablar. Esa memoria que le permite al protagonista del dìa de la marmota darse cuenta de lo que està ocurriendo mientras todos los demàs parecen sufrir de una amnesia inexplicable.

En el Capítulo IV del libro de Rapoport - El estado en la economía nacional - el autor hace un revelador repaso de los diferentes estadíos por los que pasó la economía en nuestro país y a la par describe la relación entre los factores de poder y el estado a lo largo del tiempo. 

Es algo asì como el dia de la marmota. Los hechos històricos y los actores que los porducen son siempre los mismos y se repiten una y otra vez casi sin variaciones.

Descubrimos por allí que las politicas en favor de un estado intervencionista se alternan cíclicamente con las de un estado liberal como en una calesita que maneja siempre el mismo dueño. Liberal cuando las variables macroeconómicas favorecen la recolección de utilidades extraordinarias que van a parar siempre a unos pocos bolsillos privados y luego, cuando los tiempos son desfavorables y las deudas privadas se tornan agobiantes aparece un estado intervencionista y regulador que socializa dichas pérdidas para que las soventen los que menos tienen. 

Para los que creen que esta cuestión fue una novedadde aparecida de un repollo que estalla en 2001 es menester que tomen en cuenta que situaciones similares se han estado produciendo cíclicamente a lo largo de casi toda nuestra historia convirtiéndose en una suerte de columna vertebral de ésta y que termina por explicar hechos como el reciente ataque especulativo de la Shell coincidente con el lock out de los terratenientes agroexportadores.

Con mayor o menor tecnología asociada casi casi que nada nuevo hubo desde antes de 1810 a la fecha.

Desde aquellos tiempos la entonces incipiente burguesía terrateniente criolla de origen español primero y luego, ya transcurrida buena parte del siglo XIX y a hasta principios del XX después, los advenedizos nuevos ricos constructores de la nación liberal capitalista dependiente, las clases dominantes hicieron lo que vienen haciendo hasta hoy. Esto es copar y mantener el control de los mecanismos del estado sin importar los medios y ponerlo a su servicio a costa del esfuerzo de las clases subalternas, verdaderos productores de riqueza. 

Es que la ampulosamente llamada Revoluciòn de Mayo solo fue un golpe de estado polìtico de caracterìsticas burguesas que en nada modificò el modo de producciòn y apropìacion de la riqueza. Mantuvo la exclusiòn colonial de las clases subalternas, pobres, mestizos, indios, iletrados y no propietarios mientras consolidaba el poder politico y la riqueza en manos de unos pocos. Mucho ruido repùblicano pocas nueces democràticas.

En el capítulo dedicado a analizar la forma en como se estructuró el sistema financiero y la creación del Banco Central de nuestro país, Rapoport enumera no menos de cinco crisis financieras ocurridas entre la de 1873 y la globalmente famosa de 1929. En todos los casos los poderes fácticos operaron el sistema político, jurídico y económico en su estricto beneficio sin importar aquella discusiòn teòrica y acadèmica sobre estado intervencionista o estado liberal. Todo sirviò para asegurar el status quo. Los ricos tienen derecho a serlo y los pobres pagan por ello.

Fue y sigue siendo la presencia dominante y bruta de una burguesía terrateniente y comercial aliada a los intereses del capitalismo global dominante que se dedican a la expoliaciòn de riquezas naturales y fuerza de trabajo. Nada mas que eso. Nada de ideas, ni razonamientos, ni argumentos, solo fuerza bruta y no otra cosa. 

Esa es la ùnica ideologìa de las clases dominantes y es por ello que resulta inútil y estéril sostener un dialogo democrático con éllas o sus representantes e interemediarios mientras las clases subalternas deban someterse a sus condiciones de dominación por medio del sistema económico de producción.

El caso es que por estos dìas veo, presencio, escucho y hasta intervengo en larguìsimas discusiones entre enfervorizados contendientes que gastan su tiempo tratando de vencer argumentalmente al otro pretendiendo demostrar ya sea las bondades del estado intervencionista o de las polìtcas del laissez faire liberal. 

La historia se repite sin variaciones como si fuera la primera vez que los hechos ocurren de este modo, tal como en la pelicula y yo me siento un poco como Phil. ¿Que hago repitièndome cada dìa en este circuito estèril?

Falta la memoria. Aùn aquellos que dicen honrarla olvidan ràpidamente el peso de lo ocurrido y las experiencias vividas para terminar proponiendo lo mismo que sus oponentes circunstanciales, es decir unas falacias infundadas basadas solo en resentimientos y ofensas que terminan siendo todas funcionales a que nada cambie.

Hasta la pròxima.

jueves, 30 de enero de 2014

Recuerdos y escritos del terror

Texto publicado en Hoydía.com bajo el título Recuerdos y escritos del terror
que hace referencia al trabajo de Laura Giussani en la Biblioteca Nacional  donde está recopilando correspondencia de la época de la dictadura civico militar.

Testimonios 

La periodista Laura Giussani recopila en la Biblioteca Nacional la correspondencia entre presos políticos, militantes y sus familiares durante la última dictadura cívico-militar
por Clarisa Ercolano


Cuando la madre de Laura Giussani, la periodista Julia Constenla, murió en 2011, en su casa comenzaron a abrirse cajas con cartas, textos, fotos, papeles y memorias. Allí, a un costado del olvido, estaba la correspondencia entre sus padres desde el exilio en Estados Unidos, y las suyas, desde Italia. Ese fue el disparador, la excusa de Laura para volver a resignificar el duelo una vez más. Pensó entonces en “Cartas de la Dictadura”, fue a la Biblioteca Nacional y habló con Horacio González, su director. Allí se enteró de la existencia del espacio de Archivos y Documentos Particulares y comenzó la idea de una colección con donación de documentos familiares destinados a investigación periodística y de historiadores, con eje en el intercambio de las cartas durante la última dictadura.
Ahora, cartas escritas desde la sombra de la detención, la angustia del exilio o la insoportable clandestinidad entre 1976 y 1983, se reúnen en ese espacio documental que no sólo es histórico. Las miradas de las familias, amigos, vecinos, relatan en primera persona el espanto por un país donde el terror parecía no saciarse nunca.
“Esta colección se encuentra abierta actualmente a la recepción de nuevos materiales para todas las personas que estén dispuestas a donar sus epistolarios de aquella época”, cuenta Laura, hija de un matrimonio de periodistas exiliado en la dictadura, quien después de ordenar sus propias cartas comenzó a recibir material de militantes, familiares, amigos, intelectuales, hasta reunir más de 700 donadas por 16 familias desde el 2011. El exilio de su familia sobrevino después de que la casa en la que vivían en el Tigre fuera allanada casi al mismo tiempo que la de su vecino y colega Rodolfo Walsh, luego asesinado en 1977.
“Todo esto es el resultado de todo lo que había en una casa de periodistas: diarios, documentos, cartas que nos enviamos en nuestros exilios, un material histórico con Ernesto Sabato, en donde mis padres le decían que se exiliara”, describe Laura. Y agrega que “si alguien quiere hacer una investigación sobre los intelectuales de los años ’70 allí hay, por ejemplo, documentos de David Viñas, Silvio y Arturo Frondizi, Dardo Cúneo, entre otros”. El proyecto original se llamaba “La historia en una caja de zapatos” y buscaba armar una base de datos para ordenar las cartas según temas de interés.
Ahora, Laura asegura que es un archivo histórico ilimitado, “no se cierra el tiempo para donar material; la biblioteca es un buen lugar para conservarlas porque muchas cartas se perdieron o deterioraron por las idas y venidas o por estar mal guardadas”.
Quienes entregan sus cartas agradecen el espacio y que se considere a su vida o a la de los suyos como una pieza más de la historia que no se reserva solamente a los que trascendieron por su fama o por su postura política. “A veces al común de la gente le cuesta comprender cómo vivimos y sobrevivimos en ese entonces. Leyendo las cartas entendemos la muerte y el horror de la época pero vemos además la vida, los lazos afectivos que hicieron que pudiésemos sobrevivir, la solidaridad, las familias acompañando”, resume.
La historia de Laura y las cartas cruzan su vida, desde su exilio en Italia con sus hermanos cuando con 16 años se enteraba por carta de que una amiga había muerto por una bomba que le explotó en las manos y también por carta le contaban de fusilamientos en el cementerio de Lanús, mientras algunos medios hablaban de “presos muertos en intentos de fuga”. Esa historia que hoy ordena, recopila, amplía, como una reserva indispensable de la memoria.

Archivos y Colecciones Particulares: Agüero 2502 3er. piso, CABA.
E-mail:
archivosycolecciones@bn.gov.ar

lunes, 27 de enero de 2014

Discuso de Alvaro García Linera a la izquierda europea


Transcripcion del discurso de García Linera publicado en "El Correo de la diáspora latinoamericana"

El IV Congreso del Partido de la Izquierda Europea (PIE) reunió 30 formaciones de izquierdas europeas en Madrid entre el 13 y el 15 de diciembre de 2013, en busca de un discurso para unifiicar estrategias frente a las políticas de austeridad y de sumisión de Bruselas al dictado de los mercados. Este fue el discurso del invitado Vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Alvaro García Linera :

Muy buenas tardes a todos ustedes.
Permítanme celebrar este encuentro de la Izquierda europea y en nombre de nuestro Presidente Evo, en nombre de mi país, de nuestro pueblo, agradecer la invitación que nos han hecho, para compartir un conjunto de ideas, de reflexiones en este tan importante congreso de la Izquierda Europea...
Permítanme ser directo, franco... pero también pro positivo.
¿Qué vemos desde afuera de Europa ? Vemos una Europa que languidece, una Europa abatida, una Europa ensimismada y satisfecha de sí misma, hasta cierto punto, apática y cansada. Sé que son palabras muy feas y muy duras, pero así lo vemos. Atrás ha quedado la Europa de las luces, de las revueltas, de las revoluciones. Atrás, muy atrás ha quedado la Europa de los grandes universalismos que movieron al mundo, que enriquecieron al mundo, y que empujaron a los pueblos de muchas partes del mundo, a adquirir una esperanza y movilizarse en torno a esa esperanza.
Atrás han quedado los grandes retos intelectuales. Esa interpretación que hacían y que hacen los post modernistas de que se acabaron los grandes relatos, a la luz de los últimos acontecimientos, parce ser, que lo único que encubre, son los grandes negociados de las corporaciones y del sistema financiero.
No es el pueblo europeo el que ha perdido la virtud, ni ha perdido la esperanza, porque la Europa a la que me refiero, cansada, la Europa agotada, la Europa ensimismada, no es la Europa de los pueblos, es ésta silenciada, encerrada, asfixiada. Y la única Europa que vemos en el mundo, es la Europa de los grandes consorcios empresariales, la Europa neoliberal, la Europa de los grandes negociados financieros, la Europa de los mercados y no la Europa del trabajo.
Carente de grandes dilemas, horizontes y esperanzas, sólo se oye —parafraseando a Montesquieu— sólo se oye el lamentable ruido de las pequeñas ambiciones y de los grandes apetitos.
Unas democracias sin esperanza y sin fe, son democracias derrotadas. Unas democracias sin esperanza y sin fe, son democracias fosilizadas. En sentido estricto, no son democracias. No hay democracia válida que sea simplemente un apego, aburrido a instituciones fósiles con las que se cumplen rituales cada tres, cada cuatro o cada cinco años, para elegir a los que vendrán a decidir de mala manera sobre nuestros destinos. Todos sabemos, y en izquierda más o menos compartimos, un pensamiento común de cómo hemos llegado a semejante situación. Los estudiosos, los académicos, los debates políticos brindan un conjunto de ejes interpretativos de lo mal que estamos y de cómo hemos llegado ahí. Un primer criterio compartido, de ¿cómo hemos llegado a esta situación ?, es que entendemos que el capitalismo ha adquirido –no cabe duda- una medida geopolítica planetaria absoluta. El mundo entero se ha redondeado. Y el mundo entero deviene un gran taller mundial. Una radio, un televisor, un teléfono, ya no tiene un origen de creación, sino que el mundo entero se ha convertido en el origen de creación. Un chip se hace en México, el diseño se hace en Alemania, la materia prima es latinoamericana, los trabajadores son asiáticos, el empaque es norteamericano, y la venta es planetaria.
Esta es una característica del moderno capitalismo -no cabe duda- y es a partir de ello que uno tiene que tomar acciones.
Una segunda característica de los últimos veinte años, es una especie de regreso a una acumulación primitiva perpetua. Los textos de Karl Marx, que retrataba el origen del capitalismo en el siglo XVI, XVII, hoy se repiten y son textos del siglo XXI. Tenemos una permanente acumulación originaria que reproduce mecanismos de esclavitud, mecanismos de subordinación, de precariedad, de fragmentación, que lo retrató, excepcionalmente Carlos Marx. Solo que el capitalismo moderno reactualiza la acumulación originaria. La reactualiza, la expande, la irradia a otros territorios para extraer más recursos y más dinero. Pero junto con esta acumulación primitiva perpetua – que va definir las características de las clases sociales contemporáneas, tanto en nuestros países como en el mundo, porque reorganiza la división del trabajo local, territorialmente, y la división del trabajo planetario-. Junto con eso tenemos una especie de neo acumulación por expropiación. Tenemos un capitalismo depredador, que acumula, en muchos casos produciendo en la aéreas estratégicas : conocimiento, telecomunicaciones, biotecnología, industria automovilística, pero en muchos de nuestros países, acumula por expropiación. Es decir, ocupando los espacios comunes : biodiversidad, agua, conocimientos ancestrales, bosques, recursos naturales… Esta es una acumulación por expropiación -no por generación de riqueza- sino por expropiación de riqueza común, que deviene en riqueza privada. Esa es la lógica neoliberal. Si criticamos tanto al neoliberalismo, es por su lógica depredatoria, y parasitaria. Más que un generador de riquezas, más que un desarrollador de fuerzas productivas, el neoliberalismo es un expropiador de fuerzas productivas capitalistas y no capitalistas, colectivas, locales, de sociedades.
Pero también la tercera característica de la economía moderna, no es solamente acumulación primitiva perpetua, acumulación por expropiación, sino también por subordinación – Marx diría subsunción real del conocimiento y la ciencia a la acumulación capitalista-. Lo que algunos sociólogos llaman sociedad del conocimiento. No cabe duda, esa son las aéreas más potentes y de mayor despliegue de las capacidades productivas de la sociedad moderna.
Pero también la cuarta característica y cada vez más conflictiva y riesgosa, es el proceso de subsunción real del sistema integral de la vida del planeta. Es decir de los procesos metabólicos entre los seres humanos y la naturaleza.
Estas cuatro características del moderno capitalismo, redefine la geopolítica del capital a escala planetaria, redefine la composición de clase de las sociedades, redefine la composición de clase y de las clases sociales en el planeta.
No solamente está la externalización -a las extremidades del cuerpo capitalista de la clase obrera tradicional, clase obrera que vimos urgir en el siglo XIX y principio del siglo XX que ahora se transfiere a las zonas periféricas, Brasil, México, China, la India, Filipinas – sino que también surge, en las sociedades más desarrolladas, un nuevo tipo de proletariado. Un nuevo tipo de clase trabajadora. La clase trabajadora de cuello blanco. Profesores, investigadores, científicos, analistas, que no se ven a sí mismos como clase trabajadora, se ven a sí mismo como pequeños empresarios seguramente, pero que en el fondo constituyen una nueva composición social de la clase obrera, del principio del siglo XXI. Pero a la vez también tenemos una creación -de lo que podríamos denominar- en el mundo, un proletariado difuso. Sociedades y naciones no capitalistas, que son subsumidas formalmente a la acumulación capitalista. América Latina, Africa, Asia, hablamos de sociedades y de naciones no estrictamente capitalistas, pero en el conjunto aparecen subsumidas y articuladas como formas de proletarización difusa. No solamente por su cualidad económica, sino por las propias características de unificación fragmentada, o de difícil fragmentación, por su dispersión territorial.
Tenemos entonces, no solamente una nueva modalidad de la expansión de la acumulación capitalista, sino que también tenemos un reacomodo de las clases y del proletariado y de las clases no proletarias en el mundo. El mundo hoy es más conflictivo. El mundo hay esta más proletarizado, solamente que las formas de proletarización, son distintas a las que conocimos en el siglo XIX, principio del siglo XX. Y las formas de proletarización de estos proletarios difusos, de estos proletarios de cuello blanco, no toman necesariamente la forma de sindicato. La forma sindicato a perdido su centralidad, en algunos países, y surgen otras formas de unificación de lo popular, de lo laboral, de lo obrero. ¿Qué hacer ? - la vieja pregunta de Lenine- … ¿Qué hacemos ? … Compartimos definiciones de lo que está mal, compartimos definiciones de lo que está cambiando en el mundo, y frente a estos cambios no podemos responder -o mejor- las respuestas que teníamos antes son insuficientes, si no, no estaría gobernando la derecha, acá en Europa. Algo ha faltado y algo está faltando a nuestras respuestas. Algo está faltando a nuestras propuestas. Permítanme, de manera modesta, hacer cinco sugerencias en esta construcción colectiva del quehacer que asume la izquierda europea.
La izquierda europea no puede contentarse con el diagnóstico y la denuncia. El diagnóstico y la denuncia sirve para generar indignación moral y es importante la expansión de la indignación moral, pero no genera voluntad de poder. La denuncia no es una voluntad de poder. Puede ser la antesala de una voluntad de poder, pero no es la voluntad de poder. La izquierda europea, la izquierda mundial, a esta vorágine depredadora de naturaleza y de ser humano, destructivo, que lleva adelante el capitalismo contemporáneo, tiene que aparecer con propuestas o iniciativas. La izquierda europea, y las izquierdas de todas las partes del mundo, tenemos que construir un nuevo sentido común. En el fondo, la lucha política es una lucha por el sentido común. Por el conjunto de juicios y de prejuicios. Por la forma en cómo de manera simple la gente : el joven estudiante, el profesional, la vendedora, el trabajador, el obrero, ordena el mundo. Ese es el, sentido común. La concepción del mundo básica, con la que ordenamos la vida cotidiana. La manera de cómo valoramos lo justo y lo injusto, lo deseable y lo posible, lo imposible y lo probable. Y la izquierda –mundial, la izquierda europea- tiene que luchar por un nuevo sentido común, progresista, revolucionario, universalista. Pero es obligatoriamente, un nuevo sentido común.
En segundo lugar, necesitamos recuperar – como lo hacia el primer expositor de manera brillante- el concepto de democracia. La izquierda siempre ha reivindicado la bandera de la democracia. Es nuestra bandera. Es la bandera de la justicia, de la igualdad, de la participación. Pero para eso tenemos que desprendernos de la concepción de la democracia como un hecho meramente institucional. ¿La democracia son instituciones ? Sí, son instituciones. Pero es mucho más que institución. ¿La democracia es votar cada cuatro o cinco años ? Sí, pero es mucho más que eso. ¿Es elegir el Parlamento ? Sí, pero es mucho más que eso. ¿Es respectar las reglas de la alternancia ? Sí, pero es mucho más que eso. Esa es la manera liberal, fosilizada, de entender la democracia en la que a veces quedamos encerrados. ¿La democracia son valores ? Son valores, principios organizativos del entendimiento del mundo : la tolerancia, la pluralidad, la libertad de opinión, la libertad de asociación. Están bien, son principios, son valores, pero no son solamente principios y valores. Son instituciones, pero no son solamente instituciones. La democracia es práctica. La democracia es acción, colectiva. La democracia en el fondo es creciente participación en la administración de los comunes, que tiene una sociedad. Hay democracia si en lo común que tenemos los ciudadanos participamos. Si tenemos como un patrimonio común el agua, entonces democracia es participar en la gestión del agua. Si tenemos como patrimonio común el idioma, la lengua, democracia es la gestión común del idioma. Si tenemos como patrimonio común los bosques, la tierra, el conocimiento, democracia es gestión administración, común. Creciente participación común, en la gestión del bosque, en la gestión del agua, en la gestión del aire, en la gestión de los recursos naturales. A de haber democracia -hay democracia- en el sentido vivo, no fosilizado del término, si la población y la izquierda ayuda, participa en una gestión común de los recursos comunes, instituciones, derecho, riquezas.
Los viejos socialistas de los años 70 hablaban que la democracia debería tocar las puertas de las fábricas. Es una buena, idea pero no es suficiente. Debe tocar la puerta de las fábricas, la puerta de los bancos, la puerta de las empresas, la puerta de las instituciones, la puerta de los recursos, la puerta de todo lo que sea común para las personas. Me preguntaba nuestro delegado, de Grecia, me preguntaba sobre el tema del agua. ¿Cómo comenzamos nosotros en Bolivia ? Por temas básicos, de sobrevivencia, agua ! Y en torno al agua que es una riqueza común, que estaba siendo expropiada, el pueblo llevó adelante una “guerra” y recupero el agua para población, y luego recuperamos no solamente el agua, hicimos otra guerra social y recuperamos el gas y el petróleo y las minas y las telecomunicaciones, y falta mucho más por recuperar. Pero en todo caso este fue el punto de partida, la creciente participación de los ciudadanos de los comunes, de los bienes comunes que tiene una sociedad, una región.
En tercer lugar la izquierda tiene que recuperar también la reivindicación de lo universal, de los idearios universales. De los comunes. La política como bien común, la participación, como una participación en la gestión de los bienes comunes. La recuperación de los comunes como derecho : el derecho al trabajo, el derecho a jubilación, el derecho a la educación, gratuita, el derecho a la salud, el derecho a un aire limpio, el derecho a la protección de la madre tierra, el derecho a la protección de la naturaleza. Son derechos. Pero son universales, son bienes comunes universales frente a los que la izquierda, la izquierda revolucionaria, tiene que plantearse medidas concretas, objetivas y de movilización. Leía, en el periódico, como se estaba utilizando en Europa recursos públicos para salvar bienes privados. Esa es una aberración, estaban utilizando el dinero de los ahorristas europeos para salvar la quiebra de los bancos. Estaban usando lo común para salvar lo privado. El mundo está al revés ! Tiene que ser al revés, usar los bienes privados para salvar y ayudar los bienes comunes. No los bienes comunes para salvar los bienes privados. Los bancos tienen que tener un proceso de democratización y de socialización de su gestión. Porque si no los bancos van a acabar por quitar no solamente su trabajo, su casa, su vidas, su esperanza y todo… y esto es algo que no se puede permitir.
Pero también reivindicar – en nuestra propuesta como izquierda- una nueva relación metabólica entre el ser humano y la naturaleza. En Bolivia, por nuestra herencia indígena, llamamos eso una nueva relación entre ser humano y naturaleza. El Presidente Evo dice, la naturaleza puede existir sin el ser humano, el ser humano no puede existir sin naturaleza. Pero, no hay que caer en la lógica de la economía verde, que es una forma hipócrita de ecologismo.
Hay empresas que parecen ante ustedes los europeos como protectores de la naturaleza y con el aire limpio, pero esas mismas empresas nos llevan a nosotros a la Amazonia, nos llevan a América o a Africa, todos los desperdicios que aquí se generan. Aquí son depredadores o aquí son defensores y allí se vuelven depredadores. Han convertido la naturaleza en otro negocio. Y la preservación radical de la ecología no es un nuevo negocio, ni una nueva lógica empresarial. Hay que restituir una nueva relación. Que es siempre tensa. Porque la riqueza que va satisfacer necesidades requiere transformar la naturaleza y al transformar la naturaleza modificamos su existencia, modificamos el BIOS. Pero al modificar el BIOS, como contra finalidad muchas veces, destruimos al ser humano y también a la naturaleza. Al capitalismo no le importa porque eso es un negocio para él. Pero a nosotros sí, a la izquierda sí, a la humanidad sí, a la Historia de la humanidad si le importa. Necesitamos reivindicar una nueva lógica de relación… no diría armónica, pero si metabólica. Mutuamente beneficiosa, entre entorno vital natural y ser humano. Trabajo, necesidades.
Por último, no cabe duda que necesitamos reivindicar la dimensión heroica de la política. Hegel veía la política en su dimensión heroica. Y siguiendo a Hegel supongo, Gramsci decía, que las sociedades modernas, la filosofía y un nuevo horizonte de vida, tienen que convertirse en fe, en la sociedad, o solamente puede existir como fe el interior de la sociedad. Esto significa que necesitamos reconstruir la esperanza. Que la izquierda tiene que ser la estructura organizativa, flexible, crecientemente unificada, que sea capaz de rehabilitar la esperanza en la gente. Un nuevo sentido común, una nueva fe –no en el sentido religioso del término- sino una nueva creencia generalizada por la que las personas apuestan heroicamente su tiempo, su esfuerzo, su espacio, su dedicación.
Yo saludo – lo que comentaba mi compañera, cuando nos decía, hoy nos estamos reuniendo 30 organizaciones políticas- Excelente ! Quiere decir que es posible reunirse. Que es posible de salir de los espacios estancos. La izquierda tan débil de hoy en Europa, no puede darse el lujo de distanciarse de sus compañeros. Podrá haber diferencias en 10 o 20 puntos, pero coincidimos en 100. Esos 100 que sean los puntos de acuerdo, de cercanía, de trabajo. Y guardemos los otros 20 para después. Somos demasiados débiles como para darnos el lujo de seguir en peleas de capilla y de pequeños feudos, distanciándonos del resto. Hay que asumir una lógica nuevamente gramsciana, unificar, articular, promover.
Hay que tomar el poder del Estado, hay que luchar por el Estado, pero nunca olvidemos que el Estado más que una maquina, es una relación. Más que materia es idea. El Estado es fundamentalmente idea. Y un pedazo es materia. Es materia como relaciones sociales, como fuerza, como presiones, como presupuestos, como acuerdos, como reglamentos, como leyes. Pero es fundamentalmente idea, como creencia de un orden común, de un sentido de comunidad. En el fondo la pelea por el estado, es una pelea por una nueva manera de unificarnos, por un nuevo universal. Por un tipo de universalismo que unifica voluntariamente a las personas.
Pero eso requiere entonces, haber ganado previamente las creencias. Haber derrotados a los adversarios previamente en la palabra, en el sentido común. Haber derrotado previamente las concepciones dominantes de derecha en el discurso, en la percepción del mundo, en las percepciones morales que tenemos de las cosas. Y entonces eso requiere un trabajo muy arduo. La política no es solamente una cuestión de correlación de fuerzas, capacidad de movilización. Que en su momento lo será. Es fundamentalmente convencimiento, articulación, sentido común, creencia, idea compartida, juicio y prejuicio compartido respecto al orden del mundo. Y ahí la izquierda no solamente contentarse con la unidad de las organizaciones de izquierda. Tienen que expandirse hacia el ámbito de los sindicatos, que son el soporte de la clase trabajadora, y su forma orgánica de unificación. Pero también hay que estar muy atentos -compañeros y compañeras- a otras formas inéditas de organización de la sociedad, las reconfiguración de las clases sociales en Europa y en el mundo, va a dar lugar a formas diferentes de unificación, formas más flexibles, menos orgánicas, quizás más territoriales, menos por centros de trabajo. Todo es necesario. La unificación por centros de trabajo, la unificación territorial, la unificación temática, la unificación ideológica… es un conjunto de formas flexible, frente a los cuales la izquierda tiene que tener la capacidad de articular, de proponer y de unificar, y de salir adelante.
Permítanme en nombre del presidente, en nombre mío, felicitarlos, celebrar este encuentro, de desearles y exigirles -de manera respetuosa y cariñosa- ¡luchen, luchen, luchen ! No nos dejen solos a otros pueblos que estamos luchando de manera aislada en algunos lugares, en Siria, algo en España, en Venezuela, en Ecuador, en Bolivia. No, nos dejen solos, los necesitamos a Uds, más aun a una Europa que no solamente vea a distancia lo que sucede en otras partes del mundo, sino nuevamente una Europa que vuelva nuevamente a alumbrar el destino del continente y el destino del mundo.
Felicidades y muchas gracias !
Discurso de Alvaro García Linera

domingo, 26 de enero de 2014

Puerto Rico - Territorio Latinoamericano colonizado por EEUU en el Caribe

Celac - Probable mención de CFK al estatus colonial de Puerto Rico

A continuación reproducimos la entrevista a Héctor Pesquera Sevillano quien es presidente del Movimiento Independentista Nacional Hostoniano de Puerto Rico publicada en Tiempo Argentino.
Un mano a mano exclusivo con un protagonista de la lucha del pueblo de Puerto Rico por su independencia aporta una dosis de claridad para comprender la problemática. Héctor Pesquera Sevillano es presidente del Movimiento Independentista Nacional Hostoniano (MINH) y opina sobre la posición venezolana, rechaza las decisiones adoptadas por el gobierno de Obama y pide a la CELAC poner al pueblo puertorriqueño y a su gobierno a mirar al sur. 
–¿Cuál es la posición del movimiento independentista sobre la propuesta venezolana de que Puerto Rico ingrese a la CELAC?
–El movimiento independentista puertorriqueño se siente sumamente complacido y esperanzado de poder ocupar una silla, como miembro observador, de la CELAC. Desde que el comandante Hugo Chávez Frías propuso la creación de tan importante instancia de integración caribeña y latinoamericana, hemos planteado que la CELAC no estará completa sin la participación de Puerto Rico. La determinación del gobierno colonial de Puerto Rico de rechazar su participación en la CELAC no debe desalentarnos. Después de todo, como nos advirtiera Pedro Albizu Campos, a los pueblos les representan quienes les afirman, no quienes les niegan.
–En 2013, el Comité de Descolonización de la ONU se pronunció afirmando necesaria la independencia y autodeterminación de Puerto Rico. ¿Esto hizo cambiar en algún aspecto la posición del gobierno de Barack Obama? ¿Cuál es la evaluación del MINH sobre las sucesivas muestras de solidaridad con respecto a la lucha independentista del pueblo puertorriqueño?
–El gobierno de EE UU ha ignorado consistentemente las expresiones del Comité de Descolonización de la ONU, del Movimiento de Países No Alineados y, más recientemente, de la CELAC para que propicie un verdadero proceso de descolonización, de conformidad con el derecho internacional. Washington ha alegado que el caso de Puerto Rico es un "asunto doméstico", que no le compete a la comunidad internacional. De ahí, la importancia de la Declaración de Santiago de Chile –de la Primera Cumbre de la CELAC–, que expresa en su párrafo 21: "Destacamos el carácter latinoamericano y caribeño de Puerto Rico y, al tomar nota de las resoluciones sobre Puerto Rico adoptadas por el Comité Especial de Descolonización de las Naciones Unidas, consideramos que (Puerto Rico) es un asunto de interés de la CELAC." El MINH tiene tres pilares estratégicos: la lucha a nivel nacional, la lucha a nivel de las comunidades de puertorriqueños que residen en EE UU, y la lucha a nivel internacional. Es lo que hemos llamado el trípode de nuestra lucha. El fortalecimiento de la solidaridad internacional contribuye fuertemente al desarrollo de las otras dos patas del trípode.
–¿En Puerto Rico hay persecución al movimiento independentista? ¿Cuál es la situación de Óscar López Rivera, condenado desde 1981 en EE UU? 
–Desde el mismo día de la invasión a Puerto Rico, en 1898, el independentismo ha sido perseguido, encarcelado y reprimido por el imperialismo. Han criminalizado el ideal independentista, al punto de que un gran sector de la población siente temor de expresar su simpatía con el proyecto independentista. Hoy día, aunque con métodos más sofisticados, el imperialismo estadounidense, a través de sus agencias policíacas como el FBI, la CIA, el Tribunal de EE UU en Puerto Rico y la policía local, han continuado su política de persecución. El caso más dramático es el de Oscar López Rivera, quien lleva 32 años encarcelado en EE UU, acusado de "conspiración sediciosa". Es decir, de querer derrocar por la fuerza al gobierno norteamericano. No ha sido acusado y mucho menos convicto de ningún acto de violencia o daño a persona alguna. Sin embargo, lo han mantenido como rehén durante más de tres décadas, como disuasivo para desalentar la lucha revolucionaria del movimiento independentista. La comunidad internacional y particularmente la CELAC tienen mucho que aportar en la campaña de excarcelación que se desarrolla actualmente.
–¿Cómo cree que será 2014 en relación con la lucha por la independencia de Puerto Rico? ¿Piensa que a partir de la propuesta venezolana se reabrirá el debate sobre la independencia?
–Se vislumbra como un año de grandes adelantos en el proceso descolonizador y el nacimiento de la República de Puerto Rico, la más joven del Caribe y Latinoamérica. La propuesta venezolana ya consiguió reabrir el debate regional sobre la independencia. Ahora le corresponde a la CELAC poner al pueblo puertorriqueño y a su gobierno a mirar al Sur. ¿Pueden los países miembro de la CELAC expresar su disposición a asistir al financiamiento y desarrollo de la República de Puerto Rico? Sería interesante ese escenario. Lo fundamental es que el pueblo puertorriqueño vea, de una manera clara y precisa, que la salida no es una mayor integración a Estados Unidos sino, por el contrario, desligarnos de los depredadores de Wall Street e integrarnos al bloque económico de la comunidad latinoamericana y caribeña, una de las pocas regiones que experimenta un sólido desarrollo y crecimiento económico. La CELAC puede brindarle al país opciones que nos alejen de la dependencia, del secuestro económico al que nos ha sometido EE UU durante más de cien años. La CELAC puede ofrecernos que se desplomen las gríngolas que sólo le permiten a nuestro pueblo mirar hacia el Norte; y a través de esto acercarnos paulatinamente al proyecto de Betances, Hostos y Bolívar de integración antillana, caribeña y latinoamericana.

Abuelas de la Plaza