“Existe un drama secular en la Argentina, que es la tergiversación de la historia, en la que se han filtrado imposturas manifiestas canonizadas como dogmas.” Héctor Auger.
La Plata(AICA)
Leyendo el discurso que con motivo de la celebración del ritual religioso del bicentenario, el señor Auger propaló desde la tribuna que su organización tiene en La Plata y que coloca a su disposición con el beneplácito y resguardo de las leyes constitutivas del estado nacional me vinieron a la mente algunos pensamientos críticos.
Comienza Auger así su discurso
“En la proclama emitida el 26 de mayo, la Primera Junta –nosotros la llamamos así aunque fue, en realidad, la segunda- exponía por orden de dignidad sus compromisos. Encabezaba la serie de propósitos una declaración que en aquellos días no podría sorprender a nadie; manifestaba un deseo eficaz, un celo activo y una contracción viva y asidua a proveer por todos los medios posibles la conservación de nuestra Religión Santa”
Lo que no dice Auger, lo que conscientemente oculta, es parte de una historia a la que sea verdadera o no, él sí da valor de verdad pero que lo oculta para beneficio de su intención discursiva.