Este es un homenaje a los muertos inocentes causados por las bombas arrojadas por los traidores a la patria.
Infames traidores que llevaron a nuestra sociedad a niveles de enfrentamiento, dolor y muerte que jamás serán olvidados por el pueblo.
Cuando veo estas fotos no puedo menos que recordar las reflexiones públicas de Estela Carlotto cuando dice que el 16 de junio de 1955 ella, apenas adolescente en el seno de una familia radical, salió a la calle junto a ellos para festejar ingenuamente por el alzamiento militar, sin imaginarse siquiera que, como consecuencia de esa acción terrible ella misma, iba años mas tarde, a perder una hija y a un nieto que aún sigue siendo secuestrado cada día en un delito permanente mientras no se restituya su verdadera identidad.
Así, esa abuela luchadora que asume valientemente la parte de responsabilidad social e histórica que, aunque mínima, le corresponde; saca de todo ello experiencia vital y sabiduría.
También la actitud de Estela da cuenta de la inevitable conexión histórica que tienen los acontecimientos que algunos malintencionados pretenden desconocer y de la importancia de la memoria histórica en la conformación de la consciencia de los pueblos.
Hasta la próxima.
imagen: http://www.elortiba.org/1606imag.html
En un acto de inusitado arrojo de nuestra parte, con un broche de la ropa en la nariz y conteniendo las náuseas, leemos en LNOL la columna del profe titular de la cátedra de fascismo de la UBA.
