domingo, 5 de abril de 2020

Miserabilismo


Es esperable que aquellos jubilados, pensionados y toda persona que recibe un beneficio del estado que por su muy elevada edad o por otros motivos sufran de padecimientos inhabilitantes muy especialmente en lo que respecta a los procesos cognitivos y con capacidades mentales disminuidas, sean especialmente contenidos y ayudados por las instituciones del estado, o privadas y por la sociedad en general.

Ahora bien, salvando lo dicho debemos tener en cuenta que los jubilados no son unos seres pobres y miserables como zombies babeantes y sin cerebro que se desplazan tambaleantes por las calles desorientados y sin destino cierto como lo hacen parecer los inumerables discursos tanto bien como mal intencionados pero siempre discriminatorios. Discursos que se repiten y circulan en las calles o en los medios, o las redes sociales, etc ... sin el menor decoro y respeto para con los adultos mayores.
Cabe dejar en claro que todos los jubilados, en su enorme mayoría con sus capacidades intelectuales intactas y con total dominio de sus actos, ante todo son personas con plenos derechos y obligaciones como cualquier otra por lo tanto no cabe ese trato que los coloca en un "lugar común" donde son condenados a una debilidad inhibitoria esencial, a una pobreza de espíritu, a una inocencia e ingenuidad que los hace impunes y a un menosprecio de sus habilidades creativas y productivas que los inhibe de ser dueños de sí mismos y de sus actos.
Debemos tomar consciencia de que "los jubilados" dicho así, en general, entienden, aprenden, piensan, razonan, votan, compran, inclusive muchos de ellos aun trabajan en empleos formales o informales y hasta conducen empresas, es decir son plenamente responsables de sus actos.

Aprovecho para recordar a Norma Plá.
... nada, eso.

sábado, 4 de abril de 2020

Sucesos de dominio público


Después del abominable  caceroleo militante de la antipolítica y en defensa de los millonarios vino lo de las colas de jubilados en las sucursales bancarias. 

A ver, las colas en los bancos en medio de una cuarentena es un despropósito por supuesto. Los peligros de contagio y circulación del virus son reales y de seguro lamentaremos las consecuencias en unos 10 días. Ahora ya no hay modo de remediar el daño, solo pensar en evitar su reiteración.
 
Al reflexionar sobre estos eventos se nos aparecen varios niveles de responsabilidad por lo ocurrido sobre los que conviene razonar.

1.- Actividad de medios y oposición oportunista intentando limar la creciente imagen política del presidente. Continuación de la operación cacerolas en los balcones.

Una causa y no la menos importante es el nivel abrumador de desinformación generada por los medios. Las instrucciones e indicaciones oficiales estaban dadas, luego hablaremos sobre ellas, pero los medios en lugar de colaborar con su correcta difusión se dedicaron a parcializarla superponiéndola  con imágenes descontextualizadas y zócalos/títulos catástrofe mientras se difundían “opiniones especializadas” de personas no especializadas con discursos contradictorios, generando confusión,  desorientación y angustia entre aquellas personas que ya de por sí estaban confundidas, desorientadas y angustiadas por el encierro prolongado, la amenaza real de la enfermedad y sus horribles consecuencias y la escasez o falta de recursos económicos tanto reales para muchos como respetablemente imaginarias para otros tantos.

Se creó de ese modo en los días anteriores a este viernes un caldo de cultivo muy fértil para las sucias actividades de campaña de los representantes políticos oportunistas y sus empleados precarizados los troll malalecheros y de sus socios los medios cómplices, todos ellos, en su momento defensores de la desfinanciación y desmantelamiento del sistema de salud pública y que ahora dan clase de epidemiología.

Impericia política ante una situación delicada  pero sobre todo inédita

Otra de las causas importantes que aportaron lo suyo es la impericia y falta de visión política de funcionarios clave del gobierno y  eso cuando no liso y llano boicot o quite de colaboración de parte de funcionarios de segunda línea residuales de la gestión anterior camuflados y dispuestos para limar al actual como en este momento.
Respecto de los propios, parece ser notorio el hecho lamentable de no haber tenido la visión política de “limpiar” de topos o por lo menos neutralizarlos preventivamente desde antes del inicio de la emergencia sanitaria. El lema debió haber sido “Democracia sí estupidez no”.
También es remarcable el grave error político de ciertos funcionarios demasiado “técnicos” en algunos ministerios y entidades oficiales conexas como autoridades de la Anses, del BCRA, y otras al no haber previsto que estamos ante un hecho de enorme impacto social y sobre todo absolutamente novedoso que de seguro puede disparar respuestas sociales novedosas aunque no imprevisibles.

Entidades bancarias y crediticias parcialmente obedientes pero no especialmente interesadas en colaborar

No es novedad el hecho de que por definición las entidades crediticias privadas se dedican a la compra y venta de dinero con márgenes de ganancias que dan sentido único a su existencia. Cualquier otra actividad impuesta por el estado es apenas una molesta carga que genera gasto sin beneficio y en la mayoría de los casos si es obligatoria será llevada a cabo a desgano. Eso es lo que ocurre siempre y no había razón alguna para que no ocurriera ayer y ocurrió.
En relación a las entidades crediticias oficiales podemos decir que si bien sus objetivos formalmente declarados son diferentes a los de los privados y están apuntados a ofrecer un servicio público ocurre que durante muchos años y en particular en los últimos cuatro la ideología dominante impuesta por los directivos políticos direccionó a sus funcionarios hacia una mirada similar a la de los privados, es decir esencialmente rentista y en pos de la maximización de las ganancias, en este caso de ciertos usuarios particulares (como el caso de Vicentín por ejemplo) o directamente de los funcionarios políticos allí instalados por el gobierno de CEOs.

Esperar de éstas organizaciones algún tipo de colaboración espontánea en beneficio de la población es ingenuo. Debe ordenárseles en detalle y taxativamente que es lo que se les impone. No haberlo hecho es un error político de las autoridades correspondientes.
Sumemos en éste ítem la pereza política y poca cintura de los representantes gremiales del sector para ponerse a la cabeza de las acciones necesarias en pos de exigir a las entidades una dinámica más acorde a las circunstancias.

Anti-plastiquismo sistémico y caprichismo individualista.

Según algunas informaciones hay más de 1.7 millones de beneficiarios de ANSES que regularmente no utilizan el plástico para retirar fondos de sus cuentas. Las razones relevadas pueden ser variadas, desde aquellos que sistemáticamente  olvidan la clave y de ese modo terminan alimentando el apetito del insaciable cajero/máquina devorador de plástico, están los que pierden la tarjeta en otro saco o en otra bolsa o en el estante de la biblioteca, los que le tienen miedo pánico a la máquina dispensadora de billetes, los fanáticos que militan conductas supuestamente antisistema, están aquellos que como un conocido de mi suegro que con más de 10 años de jubilado contesta que “no sabía que la tarjeta era para cobrar la jubilación”, también existen los que además de todo eso desconfían de parientes y/o amigos para encomendarle las extracciones, en fin, razones varias como dijimos. A estos casi 2 millones de habituales visitadores mensuales de ventanillas bancarias se sumaron ayer muchos, demasiados que aunque se informó había ciertas prioridades y un dado orden igualmente se presentaron para hacer cola horas antes de la apertura para “ver si podían sacar la plata antes de que se acabe”
Como ya dijéramos, es obvio que no hubo la debida visión política como para prever esto, aun así podemos señalar que la imbecilidad humana alcanza ribetes exóticos.

Podemos exceptuar de nuestra crítica a algunos adultos mayores – mayores,  quienes tengan serias dificultades para ubicarse temporoespacialmente y que cuestiones de la vida además estén solos, sin familiares, ni amigos, ni vecinos confiables y de buena voluntad que los orienten y ayuden Sabemos que muchas personas mayores – mayores desarrollan actitudes y conductas algo irracionales y desconectadas del habitual curso de los acontecimientos. Esos casos sumamente respetables y que no necesitan justificación alguna más que la expresada, seguramente son escasos y completamente manejables frente a los números ya mencionados.
El resto son personas hábiles que desarrollan con total habilidad las actividades que se requieren para la vida normal, la mayoría es autónoma y en los casos que no es así se han dado las condiciones para vivir una vida normal. Muchos no son “abuelitos” y muchos otros que aun siéndolo no han perdido las capacidades de escuchar, pensar, razonar. Es decir, la mayoría de todas esas personas que aluvionaron sobre las sucursales bancarias no son unos pobres miserables discapacitados e impedidos que resultaron maltratados por un gobierno tal o cual.

Resulta razonable pensar que son simplemente unos imbéciles irresponsables  que apoyados en razones inválidas y completamente falaces han incrementado considerablemente la probabilidad de que la infección se despliegue más rápidamente entre nosotros.

domingo, 22 de marzo de 2020

Coronavirus, estadísticas y muerte.



Ayer sábado 21 de marzo de 2020 en Argentina teníamos 3 fallecidos sobre 158 infectados de Covid19 verificados. Anoche el Ministerio de Salud emitió un nuevo comunicado oficial informando que las cifras se habían incrementado a 225 infectados y 4 fallecidos. Hace un rato se comunicó que hoy hubo 41 nuevos infectados. Estos números dan cuenta de que hay aproximadamene 2 decesos cada 100 infectados detectados. Antes de comenzar las especulaciones numéricas debemos tener en claro que no es lo mismo infectados en general que infectados detectados, un número mucho menor debido a que no se testea masivamente a la población como sí lo hicieron por ejemplo en Corea del Sur.

Por otra parte el ministro de salud afirmó en declaraciones a la prensa que se espera un total de 250.000 infectados hasta fin de año de los cuales el 80% no necesitaría internación, el 20% restante sí requerirá internación (2500 camas)  pero solo el 5% puede tener una patología grave (125 pacientes graves = 125 respiradores en UTI - unidades de terpia intensiva) y de éstos pacientes solo algunos, muy pocos, tendrían consecuencias fatales.

De las declaraciones del ministro entonces surge que solo con unas 2500 camas extra y unos 125 respiradores distribuidos a lo largo de los 9 meses que faltan para terminar el año “solo algunos, muy pocos” tendría consecuencias fatales. Y por eso tanto lío? … me parece que el ministro nos está meloneando y bien que hace. Tal vez el ministro considere que es mejor que no conozcamos los datos verdaderos .. y bien que hace.

Para tener una idea aproximada de la real situación que probablemente tengamos por delante podemos hacer algunas cuentas y comparaciones. Dando por buena la estimación del ministro de 250000 infectados y al ritmo actual del 2% de fallecidos en Argentina, proyectarían unos 5000 decesos, es decir bastante mas que esos “muy pocos”. Pero por otra parte deberíamos considerar que el mantenimiento de ese índice del 2% es por ahora una estimación poco realista o por lo menos extremadamente optimista y benévola ante los terribles datos que exhibe Italia con 11% o el 6% de España o aún en comparación con el mas bajo 4% de China luego de haber detenido la epidemia desatada.

Si asumimos que en Argentina efectivamente se producirán 250.000 contagios como afirma el ministro donde un 20% requerirá internación entonces tendremos 50.000 internados. Bueno, internados no, en todo caso serán pacientes que requerirán internación pero no hace falta demasiada inteligencia para darse cuenta que ese número es muy alto y si no se “aplana la curva” es decir si no se logra ue ese número quede distribuido el año ( serían 6250 internados por mes de aquí a diciembre) como prevé el ministro sino en unos pocos meses (si fuera en 3 meses serían más de 16.000 internaciones por mes) se generaría entonces el temido colapso del sistema de salud de nuestro país que no está en condiciones de atender eficientemente a esa cantidad de pacientes.

Por otra parte si aplicáramos un índice de mortalidad algo más realista que el 2% actual como por ejemplo el 4% de China implicaría unos 10.000 compatriotas muertos. En cambio si la situación fuera como la de España tendríamos unos 15.000 muertos y si se nos descontrolara como en Italia entonces serían cerca de 28.000 los muertos.
De modo que vale la pena insistir en el hecho de que cuanto menos efectiva sea la cuarentena menos posibilidades de interrumpir la difusión desenfrenada del virus entre la población, menos se aplanará la curva, el crecimiento del número de infectados será explosivo y más alta será la probabilidad de que la situación sanitaria se salga de control y de la mano de la consecuente crisis económica la situación social se desmadre. Esto lleva directamente a una previsible declaración del estado de sitio.

Pero esto no es todo. Según algunas proyecciones bastante serias el número de infectados en verdad no será de 250.000 en el año como dijo el ministro sino mucho, pero mucho más elevado, probablemente sean unos 300.000 los infectados de hoy a finales de Mayo si la cuarentena y el cierre completo de las fronteras no resulta eficiente para cortar el proceso de contagios. Con lo cual la cantidad de camas, equipos y profesionales requeridos al sistema de salud será muchas veces mayor que el disponible hoy y mínima será la capacidad real de ampliarlo como para atajar esa avalncha, de modo que si la sociedad argentina no decide acatar a rajatabla ls instrucciones gubernamentales el panorama más probable en algún momento en el futuro cercano es que las personas enfermarán masivamente y simplemente morirán por falta de atención médica efectiva tal lo que ocurre hoy en Italia y en España donde ante la escasez de recursos materiales y humanos los enfermos más graves son dejado de lado sin asistencia para así poder garantizar la vida de los que presentan cuadros menos complicados y con más posibilidades de sobrevivir.

No salgas. No dejes que el virus entre a tu casa. La vacuna somos nosotros.

Por otra parte no me canso de decir que tenemos el mejor conductor que podríamos desear en un momento tan extremo como es este.

Hasta la próxima.

martes, 25 de febrero de 2020

Acerca de algunos de los dichos del presidente ...


Yo también tengo un amigo/compañero/familiar desaparecido, mas de uno diría , es mas tengo como 30.000, pero no creo que Alberto sea un negacionista ...

... hay algunos compañeros que están muy enojados y exaltados por los dichos del presidente, lo de "inconducta" y lo de "dar vuelta la página" y eso. Yo creo que está muy bien recordarles a todos que somos muchos los que estamos enérgicamente en contra del olvido y del perdón y por el juzgamiento y condena de todos los genocidas y por la búsqueda de los nietos que faltan, y por la apertura de los archivos y me sumo a ello una vez mas y con énfasis. Pero también creo que  es bueno recordar que Alberto, Cristina y Axel y todos aquellos a los que legitimamos cuando muchos dimos el voto al FdT, no eran la vanguardia revolucionaria armada que junto con Fidel, el Che, Camilo y los combatientes cubanos marcharon del brazo a la rosada después de bajar de la sierra y derrotar militarmente al ejército de Batista. No era eso, no. Para bien o para mal no eran eso.

Me parece que algunos de los compañeros se confundieron y por un momento creyeron algo así y ahora están desilusionados, se sienten defraudados y se enojan. No los condeno por eso pero, a ver,  cabe recordar que los delitos de lesa comenzaron a juzgarse efectivamente por iniciativa de Néstor y entonces Alberto había sido su Jefe de campaña y luego Jefe de gabinete de ministros. Pedirle credenciales o tildarlo de negacionista es o un arranque de boludez o un oposicionismo político estúpido y necio mas propio del infantilismo trosco que una defensa militante de los DDHH.

 Veamos la película y no solo el recorte falaz, manipulador y malintencionado. Las FFAA están allí, es una institución cuasi residual pero que existe, son cerca de 90.000 personas, están armadas y expresan de diversas formas a una parte no menor de nuestra sociedad. Las visiones son muy variadas pero por mí ya las hubiera disuelto hace años, no creo que sirvan para mucho o para nada bueno ni útil. Estoy convencido que son por lo menos una antigüedad y además no están en condiciones ni ideológicas, ni morales, ni materiales para eso de "defender a “La Patria” como se afirma ampulosamente desde ciertos colectivos algunos ingenuos y nostálgicos algunos y retrógrados y reaccionarios otros. 

Pero la realidad es que están allí y si no se las disuelve maltratarlas, denostarlas, ningunearlas, pauperizarlas, basurearlas no es inteligente ni útil, es mas, considero que es muy peligroso para la subsistencia de la patria de modo que si no están dadas las condiciones para su inmediata disolución, y en verdad no están dadas porque no hubo aquí un pueblo unido alzado en armas que las derrotara y expulsara a sus interesados sostenedores civiles. No hay siquiera una mayoría significativa que proponga y apoye un proyecto de disolución de las FFAA. Siendo así solo cabe hacer lo que trataron de hacer Nestor y Cristina y ahora hace el presidente es decir intentar contenerlas y recuperarlas para sumarlas a un proyecto de construcción de una nación - patria justa, libre y soberana en un contexto internacional donde ciertamente somos agredidos sistemáticamente por el capitalismo financiero internacional y sus esbirros.

Por supuesto que se puede discutir y cuestionar si las palabras usadas por el presidente fueron mas o menos acertadas o inadecuadas pero no creo que sea oportuno cascotear al gobierno y tildar al presidente de “negacionista”.  Negacionistas son Lopérfido o Gómez Centurión o Cecilia Pando o tantos otros inescrupulosos e inmorales de esa calaña. 
Pedirle credenciales a Alberto es un golpe bajo, un ataque artero o por lo menos un grave error y eso queda a la vista ahora después de las declaraciones del mismo, de Hebe y de la propia Nora Cortiñas.

El tema queda saldado entre los protagonistas pero no así entre los distintos colectivos que nos sumamos ya sea a la defensa o a la agresión contra el gobierno. Creo que si no mejoramos nuestra visión trminaremos siendo funcionales a la reeleccion de Macri.

Hasta la próxima.


Abuelas de la Plaza