lunes, 25 de mayo de 2009

Moral destituyente, ". . . consecuencia lógica"


Corren tiempos muy complicados en nuestra sociedad.

Hoy pensaba comentar sobre el festejo de un extraño Bicentenario de 199 años que se conmemoró ayer en diversos sitios de la "ciudad aduana" de Buenos Aires y que produjo el insólito, frenético y enloquecido movimiento de una enorme cantidad congéneres que en sus inútiles y contaminantes latitas rodantes iban muy apurados y diligentes a convalidar un acto "patriótico" casi sin precedentes.

Pero no. Recapacité y me decidí por reflexionar sobre el avance del pensamiento fascista en nuestra sociedad a la luz de los recientes hechos producidos por algunos ciudadanos de la localidad de Malabrigo en la provincia de Santa Fé que agredieron al Diputado Rossi en Reconquista y el posterior aval de Biolcati, quien no solo predicó para soliviantarlos sino que luego del hecho lo naturaliza declarándolo ". . . una consecuencia lógica . . .".

Los promotores del partido de la hoy algo alicaída Alianza por la Restauración Neoliberal Republicana que van por el Poder aceptan, promueven y aplican la agresión física contra los que piensan diferente.

No son sino muestras de la consecuencia de la movilización política que los ideólogos "republicanos destituyentes" están realizando de mantea constante desde hace más de un año.

La prédica de los líderes del partido restaurador promueven una etapa insurreccional y es así como los Biolcati con sus comentarios protectores y condescendientes avisan a todos los que aún permanecen tímidamente indecisos y asustados:
"Asústense más y voten a la oposición porque si no apoyan el plesbicito destituyente vendrá el reino del terror."
Que resuena por estos días junto al eslógan fascista del supuesto plan del colorado referente de la derecha bonaerense sobre la "inseguridad"

Es triste, muy triste observar cómo chicos, adolescentes, jóvenes, viejos, de cualquier sexo son llevados a ese estado de irracionalidad y emocionalidad, pero al fin y al cabo no debiera sorprenderme ni ilusionarme con explicaciones ingenuas, no todo es responsabilidad de los punteros destituyentes, estos están montados sobre la rápida emergencia de la ideología fascista de aquellos que otrora sostuviera las aventuras de los militares genocidas o el período "monetarista privatista" del menemismo o el voto cuota de la reelección de aquel modelo la que hoy aflora.

Un modelo egoísta, individualista, de desigualdad social, de discurso básicamente racista y que sin inhibiciones que sostienen como "natural" una enorme porcion de argentinos que se dicen "bien pensantes"

Al respecto aquí va mi repudio frente a los hechos, mi repudio a los dichos de Biolcati y mi solidaridad con Rossi haciendo mías sus declaraciones.
"Me genera profunda tristeza que los argentinos no podamos aprovechar estos 25 años de democracia que tenemos, que para los que militamos muchos años sabemos lo que nos costó conseguir"
En algo más de treinta días habrá que votar y una vez más la coyuntura obliga y las opciones no son muchas.

Pensemos con cuidado qué es lo que haremos sin olvidar que la democracia burguesa moderna es la consecuencia de la alianza de la burgesía con la nobleza para atemperar el poder mónárquico en la Gran Bretaña de fines del siglo XVII y que el modelo que hasta hoy aplicamos en nuestro país es herencia directa de la Revolución Francesa, aquél momento tan propagandizado por los Clarín y Nación de esos tiempos y subsiguientes, cuando los Biolcati, los DeÁngelis, los Zorzón, la época luchaban por instaurarse como nueva clase dominante cosa que lograron como todos sabemos, en el siglo XVIII.

No nos confundamos, esto es Argentina Siglo XXI y aquella democracia burguesa se construyó para asegurar la continuidad en el poder de la nueva clase burguesa dominante no para otra cosa, si bien es válida la propuesta de la vía democrática para lograr la construcción e instalación de un modelo diferente no podemos dejar de tener en claro que en definitiva es una vía contra natura así que no nos hagamos demasiadas ilusiones chicos.

Hasta la próxima.

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