Martirio del Jesuita

Antiguo Grabado Francés. Martirio del Jesuita Gonzalo De Silveira

En Valores Relgiosos, Sergio Rubin, la voz clarinética del Señor ... presidente del episcopado dice lo que el señor presidente del episcopado desea que se diga de sí mismo.

"¿Busca el oficialismo y sus conspicuos adeptos "sacar de la cancha" o, cuanto menos, "poner contra las cuerdas", a uno de los pocos dirigentes que se animó a enfrentar a Néstor Kirchner y que cuentan, como primera figura de la Iglesia en la Argentina, entre los principales enemigos en la "batalla cultural" -y de poder- que están librando."

Parece que el mèrito pùblico del hombre de la sotana que se dice pretende liderar en nuestro paìs a la secta mesiànica fundamentalista internacional con sede central en Roma, Italia,  es haberse enfrentado valientemente con un simple mortal que de tan mortal està muerto y por haberlo enfrentado es ahora salvajemente perseguido y humillado.

Parece, por lo menos de mal gusto, pretender encumbrarse a costa de la imagen de un muerto sino es un verdadero signo de  impotente debilidad intelectual y moral que se suma a la bajeza de mandar a un portavoz de bajo rango a decir lo que se desea se diga de si mismo.

En su argumentaciòn tratabdo separar el trigo de la paja(¿?) (perdòn se me escapò) reconoce el servicial Sergio R que

"Es evidente que el papel que jugó la cúpula del Episcopado durante la dictadura es, cuanto menos, controvertido. Hoy resulta claro que la estrategia que siguió, de hacer gestiones reservadas ante los jerarcas militares a raíz de las denuncias de desapariciones y torturas, no fue eficaz."

claro que se apresura a aclarar que

"... Bergoglio no integraba esa cúpula. Ni siquiera era obispo. Tenía menos de 40 años. Y carecía del panorama que con toda claridad y crudeza emergería años después"

Es decir que el valiente cruzado consagrado a la santa madre, la cuiria romana que lo pariò, el que enfrentò al temible tuerto flaco desgarbado, el hoy fenecido ex presidente de los argentino Nèstor Kirchner, habrìa arrugado hacièndose el dolobu cuando las cosas estaban para el carajo de verdad y no de mentiritas como ahora y cuando ser valiente se solìa pagaba con la vida, cosa que el juvenil Bergoglio tenìa reclaro mucho antes de cumplir sus tiernos 40 años cuando todavìa "... ni siquiera era obispo ..." el pobrecito.

¿Creerà realmente el bueno de Sergio (en comùn acuerdo con el autodenominado "hombre de dios") que la mayorìa de las personas son idiotas?

¿Creerà que alguien medianamente inteligente e informado pueda aceptar el infantil argumento de que "el jesuita", viejo y exparimentado operador eclesiàstico muy bien conectado y relacionado ya por aquel entonces, no conocìa de la cabal y horrorosa realidad que buena parte de la sociedad en nuestro paìs sì conocìa y negaba como èl?

Cierra la nota el redactor clerical de clarìn con una frase significativa

"La noble causa de los derechos humanos no merece ser bastardeada."

o tal vez quiso decir  ...

"La causa Noble (- Herrera) de los derechos humanos no merece ser bastardeada."


Hasta la pròxima