El Poder y lo simbólico

Totem Cultura Chavín

En la contratapa de Página, leemos un par de cosas que vale la pena rescatar.

La primera es una máxima que debiera ser incluida en todos los textos de lectura obligatoria para los niños pequeños (burgueses) más si ellos son aspirantes ya sea a troscos o a progres porteños, y que debieran memorizar antes de quitarse los pañales para iniciarse en las lides políticas porteñas..

"Aclaremos algo que el léxico de una derecha mentirosa y asalariada ha impuesto. Cristina Fernández no es el Poder. (...) Cristina Fernández está al frente del Gobierno. No tiene el Poder. Tiene el aparato del Estado, pero sólo eso. El Poder está en otro sitio."

De modo que Cristina Presidenta una y otra vez representa la emergencia misma del concepto de las contradicciones dentro del proceso de la historia. En ella toma cuerpo la particular correlación de fuerzas que hoy se da dentro de nuestra sociedad. Para saber como sigue este proceso solo hay una manera: vivirlo y ser testigo, pero lo que debiera estar muy en claro es que la toma del poder está muy lejos y falta mucha movilización popular para alcanzarlo si fuera ese el objetivo por lo tanto asignar al ejecutivo las responsabilidades por el "ejercicio del poder" es una falacia malintencionada venga por derecha tanto como por izquierda.

Segundo punto interesante de la contratapa de Feinmann:

"Ahora, Garré, peronista de pura cepa, quita el nombre del criminal paranoico que el viejo líder del movimiento había elegido para emprender una matanza clandestina de opositores políticos de izquierda."

Hay algo enorme y simbólico de los actos de la ministra de seguridad, mas allá de la efectividad y eficiencia material que en los mismos podamos encontrar. En ellos se puede ver claramente la caracterización del proceso por el que transitamos.

Los jóvenes de hoy liderados por los jóvenes de ayer producen el peronismo que revisa, cuestiona, critica y rectifica las acciones de su fundador resignificando y profundizando su ideario impulsados por la fuerza de una síntesis dialéctica superadora.

Por primera vez en décadas nuevamente causa orgullo ser argentino.