jueves, 18 de marzo de 2010

Alfredo Astiz es “democrático y profundamente republicano”


imagen: http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/a/a8/Gladstone_debate_on_Irish_Home_Rule_8th_April_1886_ILN.jpg

Gracias al imperio de la civilizada democracia burguesa y republicana que nos hemos sabido ganar es que estos criminales no han sido fusilados sumariamente por los delitos de lesa humanidad.

No es solo eso, tienen además de la libertad de expresión garantizada por el estado, la enorme oportunidad de que su palabra sea difundida en forma gratuita por la prensa libre.

Gozan de una libertad y oportunidad que en nuestra sociedad no tuvieron y no tienen hoy aún garantizada la gran mayoría de los perjudicados por el modelo político-social que estas personas impusieron a todos los habitantes de este mismo estado.

En vez de cumplir con su obligación de personas que es la de testimoniar acabadamente para conocer la verdad sobre los crímenes cometidos por las bandas de delincuentes que usurparon las instituciones del estado nacional, estas personas no solo no muestran un ápice de arrepenimiento sino que en actitud altanera se dan el lujo no solo de reafirmar con sus dichos todos sus actos delictivos, sino que; además de agregar la apología del delito a sus andanzas aún estando en prisión y muchos de ellos condenados; hacen proselitismo para su causa y argumentan políticamente en contra de las actuales administraciónes jurídica y política de la nación por hacer justicia popular.

Uno de los imputados como todos, se justifica de haber obedecido ordenes, pero éste en particular habla de que lo hizo "bajo fuego enemigo". Pone sobre la mesa léxico militar, pero este señor no tiene la más remota idea de lo que es "recibir y obedecer órdenes bajo fuego enemigo" ya que en las pocas oportunidades que pudo haber tenido para atravesar dicha experiencia se mostró como lo que realmente es, un cobarde y pusilánime que solo conoce de agredir a los más débiles y rendirse ante los más fuertes, una cualidad típica de los de su clase , los matones intelectualmente disminuidos y presumiblemente desorientados sexualmente.

Es mi opinión entonces que darle tribuna pública a una persona con tan baja calidad moral y humana no es misión de la administración nacional y popular del estado, ni de los medios de prensa que se arroguen tener una funcion social y/o política por más asumida que sea la subjetividad de éstos últimos.

Si con el pretexto democrático de respetar los derechos del individuo, se procede a dar lugar a este tipo de maniobras dilatorias garantizando la difusión pública de las ideas que cada uno de estos criminales acusados de delitos de lesa humanidad, la justicia popular no los alcanzaría nunca, como efectivamente está ocurriendo en muchos de los casos en que los delincuentes se deleitan transitando su vejez entre sus familiares y amigos en lujosas viviendas dentro de barrios privados, o en en el mejor de los casos en condiciones de reclusión privilegiadas custodiados, servidos y complotando con los de su clase.

Es aquí donde el sistema democrático se muestra en su verdadera naturaleza, para bien o para mal, este sistema garantiza que las desigualdades inherentes a su esencia se confirmen, se sostengan, consoliden y manifiesten en todos los lugares y momentos.

So pretexto de que la ley debe ser igual para todos profundiza las diferencias.
La verdad es que para un ignoto ladrón de automóviles del segundo cordón del GBA la espera de la definición de su causa se inicia con violaciones tumberas sistemáticas, seguidas de reducción a la servidumbre a manos de su violador, y transcurre durante varios años en medio de requisas y golpizas diarias por parte de los guardias, largas y humillantes esperas y requisas a los familiares en la visita y garantías democráticas por el estilo.
Pues bien, este tratamiento que el estado democrático le depara al acusado de segunda, no está disponible para éstos soberbios y orgullosos criminales de primera clase y sus allegados, toda gente bien y elegante.

Muchas veces me imagino a la señora Cecilia Pando siendo sometida a una revisión vaginal y anal por parte de una delicada matrona del SPF de gruesos dedos, antes de iniciar una visita al penal de Marcos Paz por ejemplo. La imagino radiante y etérea. A la Pando claro.

Ayer, el matón rubio y de ojos celestes, se definió como “democrático y profundamente republicano”. Tal vez de verdad lo sea.
Tal vez esa es la raíz de una tremenda confusión.
Tal vez seamos nosotros los que estamos equivocados y no el asesino del GTA3.3.2
Tal vez el degradado militar y sus acólitos tuvieran razón.
Tal vez cuando nos empeñamos tan tozudamente en defender un sistema que supuestamente nació en Francia en 1789 promoviendo la libertad, la igualdad y la fraternidad del hombre nos equivocamos.
Tal vez ese sistema tan publicitado por aquellos tiempos por los hombres de negocios británicos a su vez se empeñaron en ocultar la verdad de su nacimiento y esencia para garantizar su difusión y aplicación en el mundo occidental que se sometería a la fase imperial del entonces bisoño capitalismo liberal en expansión.

Tal vez si hurgamos un poco en la historia descubrimos que el verdadero nacimiento de los principios democráticos que nos rigen no fue en Francia sino muchos años antes en oscura Inglaterra de 1215 con la Carta Magna de los señores feudales contra el Rey Juan Sin Tierra y luego su paulatina y sangrienta construcción durante los siglos XIV a XVI con la creciente ganacia de poder político de los nuevos dueños del capital original por sobre los reyes absolutos.
Sus creadores, los lores que en el siglo XVII crean el sistema parlamentario inglés (aquí Los debates de Putney de 1647 ) casi tal como se lo conoce hoy, valientemente liderados por su Lord Protector Sir Oliver Cromwell , repúblico como el que más, que lamentablemente para sus seguidores y beneficiarios finaliza sus violentos días colgado de una soga por orden de la restauración monarquica de aquellos tiempos de verdad duros.

De allí que históricamente el voto democrático fue un privilegio garantizado y habilitado solo a los propietarios de la democracia tan duramente ganada (propiedad usurpada de los siervos campesinos y libres artesanos medioevales que pasaron a ser simples y pobres obreros descastados) y cada vez que se pretendió ampliar el beneficio del uso de "los derechos democráticos universales" a los no-propietarios del "poder democrático" se alzaban las voces de los adalides de la moral republicana contrarias a los cambios y hablando de revolución , caos, terrorismo, anarquia, etc. seguidas de estados de sitio, persecusiones, secuestros, fusilamientos, torturas, bombardeos, y demás beneficios "democráticos".

Entonces podemos concluir que a los primeros es a quienes defendieron y defienden los criminales genocidas hoy juzgados en nuestros civilizados y democráticos tribunales, es a los demócratas verdaderos, a los originales, a los inventores del sistema y a sus herederos de sangre e ideológicos. Estos criminales, que lo son no por imperio de un supuesto derecho democrático sino por que son criminales y punto, son en verdad auténticos demócratas y republicanos, no cabe duda. Si, tienen toda la razón esos cobardes asesinos de mujeres y niños, ellos defendieron y defienden a la democracia propiedad de los "inventores del sistema democrático" el mismo que hoy, si bien degradado, tenemos impuesto en nuestras vidas cotidianas y nosotros decimos defender para benefico de las clases populares.

La cuestión es si vamos a aceptar dicho estado de cosas como tal, lo vamos a reformar o vamos a inventar uno nuevo y superador que sirva a ideales un poco mas amplios que la simple ganacia material sine die.

Lo primero es suicida y estúpido, lo segundo es lo que tímidamente intentamos hoy, lo tercero una utopía a relizar.

Hasta la próxima.

2 comentarios:

Andrés dijo...

Buenas,

Un poco duro el tema, pero comparto plenamente.

Hay que tener paciencia. Las Madres se bancaron estoicamente todas las agachadas legales y políticas de esta "justicia republicana". y lograron transformarla. Desde la resistencia incial a la concientización de la sociedad (incluida gran parte de la familia judicial) se logró bastante.

Me da un poco de bronca que a los genocidas se los trate tan bien y a los chorritos se los condene al infierno, pero pese a esos privilegios los represores viven su pequeño calvario. Algunos como Menendez y Bussi pasarán el resto de sus días yendo y viniendo a los tribunales, y algunos de los que no tengan más causas (y por lo tanto más exposición mediática y se los olvide) estallarán por resentimiento y prenderán el ventilador en algún momento.

Lo último que quiero es un represor septuagenario que fallezca por vejación de otros presos. Que mueran como víctimas de violencia es la peor última imagen que pueden dar, mientras sus seguidores los transforman en mártires.

Que mueran pacíficamente pero condenados es la mejor revancha que la sociedad puede tomarse contra ellos.

Saludos,

Andrés

MC dijo...

Andrés, gracias por el comentario.

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