te recuerdo por haber hecho caminos,
por haber marcado un rumbo,
por haber emocionado mi alma,
Porque me sentí querido, protejido y ayudado.
Porque interpretaste mis ansias, porque canalizaste mi amor.
Te recuerdo junto a la risa de los felices,
a la seguridad de los justos,
el sufrimiento de los humildes.
Te recuerdo con piedad por tus errores,
con comprensión por tus debilidades,
con cariño por tus virtudes.
Si no fuera así, te olvidaría,
lo que sería el mas duro castigo
por no cumplir con tu deber de hombre.
Reescritura del poema de Joaquín Arrieta
Hasta siempre compañero presidente
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