miércoles, 15 de febrero de 2012

ENTREVISTA EXCLUSIVA

Es por lo menos revulsivo que haya medios de prensa y periodistas abyectos que se presten a dar espacio y servir de campana de resonacia a la voz de delincuentes genocidas.

Tal vez en un mundo donde el comercio de la banalización del mal se cotiza en alza, éste sea buen negocio. Tal vez esa sea la explicación. Aún así son cómplices.

Dar asco.
Eso es lo que hace la revista española Cambio16 a través de la pluma de Ricardo Angoso. Dar asco. Es en este triste momento de la historia contemporanea de la sociedad española cuando en un país pleno de gentes que no consiguen trabajo digno mientras la justicia fascista se ocupa de cerrar la boca y atar de manos a quien se ocupó de sentar en el banquillo de los acusados al viejo régimen franquista ilegal, fusilador y desaparecedor, esta publicación, considera importante hacer las voces de vocero de prensa de lo mas representativo de la cultura de la muerte en nuestra América del Sur.

Cree, la dirección editorial de Cambio16, que es importante que se repase y reponga detalladamente en primera plana lo que ya se sabía largamente acerca de los pensamientos y opiniones de esta bestia inmunda que hoy purga condena a prisión perpetua efectiva por los crímenes aberrantes que ha cometido. Nada nuevo. Es la NO-Noticia. El motivo es otro entonces.

Es simplemente así, los responsables editoriales de este semanario, escudados tras la supuesta actitud de profesionalismo y objetividad, han considerado importante difundir las persistentes, abyectas e inmorales opiniones e ideas perversas de este genocida convirtiéndose en cuasi apologistas del genocidio.

El escueto subtitulado de la nota suena a higiénica prevención sarcástica e insultante ante la pornográfica  extensión y perverso detalle del discurso expuesto por el delincuente genocida, que por cierto en nada ha cambiado luego de mas de 30 años.

Era innecesario. Nada agrega el reportaje de Ricardo Angoso mas que el hecho de insultar a toda la sociedad argentina quienes sufrimos en nuestros cuerpos y espíritus el despliegue de maldad y terror conducido por ese perverso fundamentalista mesiánico y sus secuaces que bien sabemos como piensa y opina el reo.


El único valor informativo posible, entonces, mas que en las archiconocidas respuestas del delincuente, va de la mano de las preguntas que Angoso preparó por cierto con visible dedicación y obvia intencionalidad. En cualquier curso académico de semiología, este reportaje sería un documento invalorable para ejercicios prácticos del taller de lectura y escritura.

Luego de asignar un amplísimo espacio a la reproducción literal de las opiniones del reo incita a éste a precisar acerca de temas que están cabal y satisfactoriamente resueltos por la Justicia Argentina a la que debiera remitirse y para nada se requiere la opinión del reo sobre ellos.

Por ejemplo pregunta Angoso:
Hay una gran disparidad en las víctimas que se ofrecen desde la izquierda, desde las Madres de Mayo,  y desde otros colectivos,  ¿cuántas víctimas o desaparecidos hubo en Argentina entre 1976 y 1982?

Es como preguntarle a un asesino serial convicto sobre la cantidad de personas que mató para aclarar la discrepancia entre sus dichos y los que dictaminó el jurado. Esa información debrá ser brindada por la justicia y nunca por el reo.

Mas adelante se presenta inocentemente asombrado para inquirir
¿¿No es sorprendente también que se hayan juzgados a oficiales y suboficiales que aquellos días tenían apenas una veintena de años o algo más?

o más aún

¿Cómo es que los antiguos terroristas, los Montoneros, no hayan sido juzgados y condenados por los muchos crímenes cometidos?

deconociendo la existencia de expresas y determinadas figuras legales que han imperado en la consideracion de cada caso.

"La lengua es opaca", aseveró alguien, pues en este caso parece que no lo es tanto ya que al leer las preguntas de Angoso podemos comprender claramente que es lo que decide expresar este señor autodenominado periodista pero en verdad devenido en vocero exultante de la última experiencia fascista en nuestro continente.

La conclusión es clara: Angoso obviamente aprueba sordamente los dichos del reo cuya ideología comparte y cree tácticamente necesario promover ahora y de paso se regocija secretamente con la polémica que el reportaje generará lo que elevará su cotización en tanto se eleve el precio de sucia mercancía en la que se ha convertido.

Los hijos de puta proliferan en los medios disfrazados de periodistas.

Hasta la próxima.

2 comentarios:

Javier dijo...

Revulsivo intento de vender la teoría de los 2 demonios por parte de uno de los genocidas responsabes . Asco siento de lo que leí

Un abrazo

MC dijo...

El intento del delincuente no me mueve el amperimetro pero el de cambio16 + Angosto me da nauseas y miedo porque ellos son la vigencia de la cultura de la muerte.

Abuelas de la Plaza